viernes. 26.04.2024

El cambio de uso de locales comerciales a pie de calle en viviendas vuelve al punto de mira. Esta práctica, está regresando al mercado y varios son los factores que explican su renacer. Los precios del alquiler y la compra de vivienda están por las nubes y la falta de vivienda nueva impide a muchos residentes acceder a una vivienda. En este último trimestre el precio del metro cuadrado de las Islas Baleares se sitúa en 2.146 euros/m2. Este incremento en el precio ha obligado a algunas familias a buscar una solución rápida a su problema habitacional, optando por comprar o alquilar locales comerciales y convertirlos en viviendas.

 

Y es que el precio de compra de un local es hasta un 50% más barato que el de una vivienda, un descuento que está atrayendo a particulares e inversores. Además, la creciente concentración de los comercios en los principales ejes urbanos y el auge de la venta por Internet ha vaciado locales comerciales, que no se usan con lo que existe una gran oferta de locales para su adquisición. En Baleares, actualmente existen 1.682 locales en venta y 860 locales que se alquilan. De ellos, 1.432 locales que se venden y 522 de los que se alquilan se encuentran en Palma de Mallorca

 

Por este motivo, no es de extrañar que cada día más personas opten por reformar locales y convertirlos en viviendas habitables. Pero la reforma de locales en vivienda no es nada nuevo, es una tendencia que comenzó a percibirse en en otoño de 2016, cuando el precio de las viviendas comenzó a aumentar. Aún así, la plataforma habitissimo afirma que en estos dos últimos años las peticiones de reforma de locales comerciales en vivienda han aumentado un 50,6% en Baleares. “El precio de la vivienda y la falta de vivienda nueva ha provocado que muchas personas opten por reformar un local pequeño de menos de 60m2 en el centro de la ciudad” afirma Carlos Naveda director general de España en Habitissimo. El coste medio de reformar un local es de 18.009€, un 24% menos que el coste medio de reformar una vivienda, según los datos registrados en la plataforma habitissimo.

 

Pero “para que un local se convierta en una vivienda, es necesario disponer de una cédula de habitabilidad, que certifique los requisitos de equipamiento, salubridad y superfície mínima y esta se adquiere a través de una reforma” afirma Carlos Naveda. La cédula de habitabilidad es un documento administrativo que acredita que una vivienda cumple con los requisitos de habitabilidad y solidez. Este documento lo acreditan los ayuntamientos, presentando previamente el certificado de fin de obra realizado por un arquitecto, arquitecto técnico o aparejador, la licencia municipal autorizando el cambio de uno y un comunicado municipal de primera ocupación. Por otro lado, si se confirma que la vivienda cumple con ellos, tan sólo acreditando que ha sido utilizada recientemente como tal documentando con contratos de alquiler, ya se podrá solicitar la cédula de habitabilidad.

 

La vivienda debe tener una superficie útil de, como mínimo, 36 m². Debe constar al menos de una estancia o sala de estar-comedor, una cámara higiénica y un equipo de cocina. Si la sala es un único espacio, debe ser posible la compartimentación de una habitación de 8 m². Si no hay un único espacio, la habitación mínima debe ser de 6 m². La altura mínima habitable debe ser entre el pavimento acabado y el techo de 2,5m. Sin embargo, en la cocina, baños y espacios de circulación, puede ser de 2,20m y en el comedor, sala de estar y habitaciones pueden admitirse, excepcionalmente, 2,30 para el paso de instalaciones y elementos estructurales.

Aumentan un 50% las peticiones para convertir un local en una vivienda en Baleares