El Conseller de Economía de Mallorca, Cosme Bonet, tiene el reto de pilotar en los próximos años el debut de la institución insular en materia de promoción turística cuando se reciban las competencias del Govern. Hablamos con el conseller sobre diferentes aspectos de actualidad.
¿Qué repercusiones tendrá la ecotasa?
La repercusión será nula en cuanto a posibles efectos negativos. Ningún turista dejará de venir a Baleares en estos momentos a causa de este impuesto con la actual demanda que tenemos. Además tendrá efectos positivos evidentes puesto que permitirá al Govern, a los Consells y Ayuntamientos reinvertir dinero en mejorar servicios que repercuten en los turistas que nos visitan. Esto el empresario turístico lo tiene que entender.
¿Tendrá poder de decisión el Consell para conseguir proyectos de la ecotasa?
Estamos dentro de la comisión que lo decidirá y en la cual el Govern se ha reservado mayoría decisoria. No me preocupa tanto que el Consell pueda decidir por que pienso que una de las virtudes de la ecotasa es que tiene unos objetivos claros como lo tuvo la original.
¿Tiene el Consell ya proyectos claros para financiar con este impuesto?
Tenemos ideas como la rehabilitación de espacios de valor patrimonial para potenciar el turismo cultural. También queremos rehabilitar zonas maduras, espacios de valor paisajístico o mejoras en carreteras de uso turístico. Quien primero tiene que poner proyectos sobre la mesa es el Govern.
¿Qué le parece el debate sobre la limitación de turistas o de cruceros?
Lo que me da más miedo de este debate es que no lo estemos magnificando. No podemos crear un debate alarmista sin tener datos sobre la mesa. Temo que crezca de forma artificial la sensación de saturación a partir de lo que hemos vivido en el centro de Palma los últimos meses por la llegada más importante de cruceros.
Lo importante es abordar el debate de forma seria y pensando cuál es la capacidad de carga que tenemos como territorio. Ahora bién poner una barrera y no dejar pasar a turistas me parece una propuesta excesiva.
¿Qué se debe hacer con el alquiler vacacional?
La ley Delgado regula una parte de el, en concreto, de las casas si bién deja fuera todo lo que son pisos y apartamentos. Tenemos que conseguir meter esta segunda parte dentro del mercado de forma regulada. Creo que es una oportunidad para poner límites sobre todo si detectamos un exceso de oferta en determinadas zonas. En el Consell defendemos que la regulación tiene que ser territorial si bién la asimilación de plazas de viviendas turísticas y las de hoteles no es una buena idea. No puedes hacer pagar por una plaza vacacional que por una plaza hotelera. Una de las claves seguramente será llegar a un acuerdo con las plataformas web de comercialización para que solo pueda publicitarse la oferta regulada.
¿Cuándo se recibirán las competencias de promoción turística?
El objetivo es 2017 pero para mi gusto se avanza demasiado lentamente en las conversaciones con el Govern. Aún tenemos que ver qué representaría esto a nivel de presupuesto.
¿Espera una partida suficiente?
No. Cuando nos llegue la oferta del Govern seguramente no será el presupuesto que queremos. Ello nos obligará a hacer una reflexión. O aplazaremos el traspaso de competencias hasta que haya más dinero o bien se cerrará un acuerdo con el compromiso de ir aumentando la aportación económica. Yo me decanto por esta segunda opción como más realista.
¿Qué dibujo propone para el futuro turístico de Mallorca?
Nuestro primer objetivo seria el de alargar la temporada de forma sostenible para no tener que depender tanto de los meses de verano. Para ello tendremos que crear productos turísticos atractivos. Una alternativa puede ser el turismo deportivo que se ha potenciado mucho en los últimos años gracias también a la implicación del sector privado. El turismo de naturaleza podría ser otra gran opción pero para nosotros la prioridad será el turismo cultural que ha sido el gran abandonado desde hace años. Entendemos que no tenemos que crear una cultura artificial para ofrecer al turista sino explicar lo que tenemos y que va más allá del sol y playa. No necesitamos inventarnos una cultura ni crear acontecimientos nuevos para atraer turismo. Además contamos con una oferta gastronómica y de vinos que puede competir con cualquier destino europeo en turismo de calidad y de experiencias. Conseguir turistas que viniesen durante más meses del año y con mayor poder adquisitivo seria lo deseable para Mallorca.
¿Cuál es su apuesta en artesanía?
El sector necesitaba apoyo más allá de subvenciones y premios. Estamos sembrando en estos momentos. Pretendemos revisar la ordenación legal sobre artesanía para poner en valor la figura del artesano. También queremos concienciar a los ayuntamientos que distingan entre los artesanos reales para evitar el intrusismo. En última instancia queremos dar promoción a la artesanía ligándola al sector turístico.
