A pesar de que 2022 ha sido un año "positivo" para el sector turístico, con un verano que en algunas zonas alcanzó cifras prepandemia y un otoño mejor de lo esperado, el incremento de costes de entre un 25% y un 27% de media respecto a 2021 ha lastrado los balances y ha pospuesto la recuperación a 2023.
Así lo ha señalado el presidente de la Mesa del Turismo, Juan Molas, que ha avanzado que para el año que viene la "sorpresa positiva" puede ser la recuperación antes de lo previsto del mercado MICE (congresos, reuniones, eventos y viajes de incentivos), con un "gran Fitur" y un Mobile Word Congress que ya muestra un "ritmo muy bueno de ventas".
De cara a 2023, el sector, que este año ha aumentado sus precios entre un 8,5% y un 9%, se enfrenta al reto de mantener la relación entre precios y servicio y potenciar el equilibrio entre la rentabilidad, la calidad y el servicio, así como al de rediseñar la formación y las condiciones de empleo.
Molas, que ha presidido este martes la última Asamblea General de la Mesa del Turismo de este año, ha dicho que espera que la ministra Reyes Maroto "deje solucionado", antes de abandonar el cargo para concurrir a las elecciones al Ayuntamiento de Madrid, la consecución de un PERTE turístico.
También ha insistido en su demanda de que la mascarilla deje de ser obligatoria en el transporte aéreo y en el transporte público, lo que a su juicio induce a la alarma entre los turistas y afecta a la competitividad con otros destinos europeos.
Otras de las reivindicaciones que el sector ha trasladado a la ministra son la creación de un ministerio único de Turismo, la reducción del IVA al 10% para los coches de alquiler y una solución definitiva para las colas de pasajeros en los controles de pasaportes de los aeropuertos españoles.
Tras manifestar su preocupación por la afectación que podría tener de cara a Navidad la huelga convocada por CCOO en los aeropuertos, Molas ha dicho que no entiende que este conflicto no se haya solucionado antes y ha confiado en que se llegue a un acuerdo que permita su desconvocatoria.
También ha explicado, de cara a un futuro presidido por la "incertidumbre" que le preocupa el mercado alemán, que ahora compra "a última hora", y que España tiene que tener en cuenta la presencia de nuevos destinos, como Marruecos, Cabo Verde, Senegal y Albania, sin olvidar el Caribe y Turquía, uno de sus grandes competidores.
Para la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, lo importante es que el sector aborde el proceso de "transformación" y "modernización" que ya necesitaba desde antes de la pandemia, para lo cual ha recordado que el Consejo Asesor de Turismo está elaborando una Estrategia de Turismo Sostenible a 2030.
Maroto, que ha intervenido en la asamblea, ha destacado que, a pesar de la incertidumbre, España va a cerrar el año con "cifras extraordinarias, muy cercanas a las de 2019 y con un gasto superior, cercano al 97 % de los niveles de prepandemia".
Según ha señalado, a lo largo del año se ha reforzado el "turismo de calidad, con un mayor gasto y más noches estancia, y esa debe ser la hoja de ruta para la consolidación de un nuevo modelo".
También ha subrayado que el Gobierno ya ha movilizado 1.800 millones de euros de los fondos europeos en inversión en patrimonio natural, cultura, mejora de destinos pioneros de sol y playa y diversificación de la oferta.
