Los grandes inversores han puesto sus ojos en Baleares a la hora de poner su dinero a trabajar a partir de la compra de activos hoteleros.Según el ultimo informe sobre el mercado vacacional en España publicado por Christie & Co en todo el estado se movieron más de 4.000 millones de euros en inversión hotelera de los cuales hasta 2.721 millones corresponden al segmento vacacional.
Se negociaron activos y carteras de primera calidad en destinos urbanos y vacacionales, alcanzando un precio medio por habitación récord de 187.000 euros, un 10% más que en 2022. Los mercados vacacionales obtuvieron el 67% del volumen total, alcanzando en Canarias y Baleares el 52% del total. Eso quiere decir que solo en Baleares se movieron hasta 974 milones de euros en este concepto. Además la fiebre inversora hizo subir las cotizaciones de las compras hasta llegar a precios nunca vistos. Así, según el mismo informe se llegaron a pagar de media hasyta 206.000 euros por habitación.
El informe también pone de relieve las proyecciones esperadas de crecimiento en cuanto a habitaciones hasta 2027. En este sentido el crecimiento en Baleares se valora en menos de 2.000 habitaciones. De ellas Mallorca crearía unas 1.200, Ibiza y Formentera otras 700 y en Menorca se espera que se creen menos de 100 habitaciones nuevas.
Hay que tener en cuenta, tal y como expone el mismo informe que solo entre 2019 y 2023 Baleares ha incrementado su planta hotelera con más de 5.400 habitaciones nuevas, de ellas 4428 en Mallorca. Lo más espectacular, y esto es lo que atrae a los inversores, es que el rendimiento por habitación ha crecido de forma muy importante. En Ibiza y Formentera el aumento ha sido del 38%, en Mallorca del 26% y en Menorca ha superado el 40%.
Según Christie & Co los motivos que han conducido a esta demanda inversora son por ejemplo la rentabilidad del sector turístico con un crecimiento superior al de la economía en general. Tambíen ha ayudado "el resurgimiento del poder adquisitivo en España, gracias al descenso de la inflación, la expansión de la economía de la UE y la percepción de seguridad que ofrece España".
El mismo informe advierte que "se espera que la demanda se mantenga fuerte en el año en curso, con reservas para la temporada de verano en máximos históricos y niveles interanuales que ya superan los de 2023. A medida que aumente la proporción de visitantes internacionales, esperamos que se reduzca la diferencia de estacionalidad entre los complejos internacionales y los nacionales. Prevemos que 2024 será un año récord tanto en pernoctaciones como en ocupación".
Christie & Co asegura que el interés inversor por los destinos vacacionales españoles seguirá siendo fuerte, a pesar de la intensificación de la competencia de otros destinos de sol y playa, las restricciones de la oferta en algunos destinos como Mallorca, la reducción de las parcelas disponibles y la agitación geopolítica en Europa del Este.