La facturación de los gimnasios en 2021 fue de 825 M€, lo que supone un 17,9% más que en 2020, cuando estalló la pandemia de la covid, pero aún es un 23% inferior al prepandémico 2019. Según un estudio difundido este martes por el Observatorio Sectorial DBK de Informa, filial de Cesce, la recuperación del mercado se vio lastrada en diciembre por el repunte de los contagios del coronavirus asociados a la variante ómicron.
El sector de los gimnasios acumulaba seis años consecutivos de crecimiento en 2019, cuando alcanzó una facturación récord (1.075 millones), hasta que en 2020, con la llegada de la pandemia y los consiguientes cierres, controles de aforos y límites a la actividad, vieron caer un 35% sus ingresos para quedar en 700 millones, volviendo así al nivel de casi 20 años atrás.
En 2021 el sector experimentó una significativa recuperación, que previsiblemente se prolongará a lo largo de 2022, según la consultora, aunque ésta se está viendo dificultada por un crecimiento de la actividad económica más débil del esperado y el repunte de los contagios del coronavirus a través de la nueva variante ómicron.
La consultora también observa un redimensionamiento en las principales cadenas, así como el cierre de cadenas de mediano y pequeño tamaño y gimnasios independientes. En total, calcula que se han cerrado unos 200 establecimientos desde la irrupción de la pandemia, hasta octubre de 2021, cuando había en funcionamiento cerca de 3.900.
En cualquier caso, y de acuerdo a los datos del informe, el sector español sigue caracterizándose por su elevada atomización, estando compuesto por operadores, en su mayor parte, de pequeño tamaño y con un ámbito de actuación local, aunque las grandes cadenas van ganando peso.
En 2020 la cuota de mercado conjunta de las diez primeras cadenas de gimnasios era del 43,8%, una cifra cinco puntos superior a la contabilizada dos años antes. Además, casi tres de cada diez establecimientos son de alguna de las cinco mayores cadenas (con el 28,3% de mercado).
