viernes. 26.04.2024

 

La indústria maderera de Mallorca es, en la actualidad, absolutamente dependiente del exterior para su producción y abastecer la demanda local. Por este motivo es cada vez más necesario obtener suministros de calidad a precios razonables.

 

Con este objetivo la empresa mallorquina CJ Fustes i Derivats quiere abrir un nuevo canal de importación estable a nivel nacional para traer madera de la lejana Ucrania. Las conversaciones con las autoridades ucranianas estan avanzadas y solo faltan resolver los permisos administrativos.

 

La directora de la empresa, Xisca Llinàs, ha explicado que se han realizado contactos con empresas ubicadas en la región de Zhytomyr, a 100 quilómetros de la capital Kiev, para importar diferentes tipos de madera principalmente de abeto. Desde allí mediante transporte ferroviario se enviarían los contenedores de madera hasta el puerto de Odessa y desde allí via marítima hasta Valencia para llegar después a Palma.

 

Los principales motivos para recurrir a Ucrania para disponer de materia prima son dos. Por una parte el precio de comercialización de la madera, mucho más barata que la de paises como Francia o Suiza desde donde se importa habitualmente.

 

Ello es posible por el coste inferior de la mano de obra y por la existencia de unas reservas de madera enormes aún por explotar.

 

Además, el coste de transporte desde Ucrania a Palma es inferior al de cualquier transporte desde la Península a Baleares.

 

La segunda razón es la calidad del producto que no desmerece para nada a la de sus competidores occidentales y por lo tanto se puede realizar exactamente los mismos productos.

 

CJ Fustes i Derivats quiere empezar no solo a disponer de madera ucraniana para su producción sino también actuar como comercializador en la Península y Mallorca.

 

 Llinás afirma que "es una gran oportunidad para ser más competitivos y rentables garantizando un producto de primera calidad al cliente".

La mallorquina CJ Fustes i Derivats quiere importar madera de Ucrania