"Pasión, una cierta inocencia, un cierto atrevimiento y pararte a pensar las cosas". Esta es la receta que ha llevado al Celler de Can Roca de ser un negocio familiar local a uno de los mejores restaurantes del mundo. Así lo ha resumido Josep Roca junto a su hermano Jordi, en el transcurso de un encuentro con los medios de comunicación en Palma para presentar la nueva etapa del proyecto que mantienen con BBVA, acompañados por el director territorial de la entidad bancaria, David Conde.
Roca ha expuesto su apuesta, en el marco de este proyecto, por la innovación, la gestión del joven talento y la formación y también como foco fundamental por la sostenibilidad. Así ha puesto como ejemplos las experiencias que llevan a cabo en su restaurante como un taller de reciclaje del vidrio con Amazón reconvirtiendo las casi 100 botellas diarias que se generan a diario en su restaurante, el reaprovechamiento del forespan de las cajas de pescado para taburetes de diseño o la reconversión del plástico en delantales.
Estas reflexiones se han realizado después de explicar que BBVA y el Celler de Can Roca renuevan su acuerdo iniciado en 2013 con valores como la innovación, la creatividad o el espiritu de superación como valores centrales.
La formación a pymes será una de las palancas de esta nueva etapa para conseguir que estas pequeñas empresas "tengan una visión estragégica para que ellas innoven, sean competitivas y puedan crecer de forma sostenible".
En cuanto a la formación BBVA y el Celler de Can Roca desarrollaran un programa formativo que consiste en becas de innovación y sostenibilidad.
En referencia a la cocina mallorquina Josep Roca ha indicado que vive el mejor momento "nunca había tenido tan buen posicionamiento gracias al trabajo de buenos embajadores y de productos agroalimentarios de calidad. Tenemos ejemplos de gente que ha pasado por casa y que ahora triunfa". Roca ha explicado que nos sentimos conectados y cercanos a Mallorca con la comida y la manera de hacer las cosas. También ha comentado que en "nuestro restaurante trabajamos con productos mallorquines como el aceite de oliva o también la sobrasada. Ha destacado también las referencias de vino mallorquín con variedades locales como el callet, el premsal, el giró o el mantonegro".
