viernes. 29.03.2024

Durante estos últimos días, numerosos artículos y portadas han alarmado a los ciudadanos británicos que tenían en mente adquirir una vivienda en las islas.

 

La salida del Reino Unido de la Unión Europea desde el pasado 1 de enero ha supuesto que sus ciudadanos pasen a ser extranjeros no comunitarios, lo cual tiene efectos directos sobre las inversiones inmobiliarias de británicos en Mallorca y resto de las Islas Baleares.

 

Desde el despacho de abogados Illeslex se informa que "una de las consecuencias del Brexit es la necesidad de obtener un permiso del Ministerio de Defensa, según una ley de 1975 sobre zonas e instalaciones de interés para la Defensa Nacional. Sin embargo, este permiso militar no será necesario si un británico o cualquier extranjero no comunitario (a excepción de suecos y noruegos) desea adquirir un bien inmueble sito en suelo urbano, ya sea un apartamento una villa o un solar".

 

Añaden desde Illeslex que "solamente sería necesaria está autorización si se quiere adquirir una vivienda ubicada en suelo rústico. La gran repercusión y alarma que ha suscitado este nuevo requisito, necesario ahora también para británicos, se debe al retraso que se dice va a suponer para realizar la transacción inmobiliaria".

 

La abogada Elisabeth Bonet Ochogavía comenta que "si bien es cierto que puede haber operaciones de compraventa sencillas y rápidas, no suele ser lo habitual cuando se trata de la compra de una finca rústica en Mallorca".

 

En este sentido recuerda que "es muy importante realizar un proceso de examen de documentación, de la realidad física del inmueble y de su situación jurídica. Es muy poco habitual encontrar una finca rústica que sea 100% legal y con toda la documentación al día".

 

Así púes, afirma que "lo más recomendable siempre en estos casos es firmar un primer contrato de arras o señal, mediante el cual el comprador entrega una parte del precio y se establece un plazo, que suele ir de 1 a 3 meses, para realizar un proceso de due diligence, para que el vendedor pueda obtener documentación esencial antes de la venta, para que se regularice la situación urbanística o, incluso y muy habitual, para que se le conceda al comprador la financiación bancaria que necesita para llevar a cabo la inversión".

 

Bonet opina que "teniendo en cuenta que para obtener el permiso militar se necesita una media de 3 meses desde su solicitud, no estamos hablando en estos casos de una demora temporal tan considerable. Está clara aquí la importancia de una buena planificación, así como de la importancia de presentar la solicitud con la debida antelación y la documentación necesaria de forma correcta para evitar más retrasos o sorpresas. En caso de no disponer de dicha autorización a la hora de firmar la escritura pública de compraventa el comprador no podrá ser inscrito como nuevo titular en el Registro de la Propiedad. Volvemos a recordar que esto no será necesario si el bien inmueble que se adquiere está situado en suelo urbano".

 

Y, volviendo al contrato de arras o señal (también contrato de opción de compra), será esencial establecer en el mismo un plazo prudencial para la obtención del permiso antes de firmar la escritura pública de compraventa.

Fake News: "Los británicos solo podrán comprar viviendas con un permiso militar"