viernes. 17.05.2024

En los últimos años, ha surgido una forma de vivir que está ganando popularidad en muchas ciudades alrededor del mundo. Estamos hablando del denominado "coliving, o convivencia colaborativa", es una solución de vivienda compartida que ofrece numerosas ventajas para los residentes. Sin embargo, a pesar de su crecimiento y aceptación, es evidente la falta de regulación urbana específica para este tipo de proyectos.

Como explica Alberto Luengo, director de Commercial de Engel & Volkers Mallorca: "En nuestra isla está fórmula es prácticamente inexistente a aún bastante desconocida pero en cambio ya existe interés de algunos inversores por crear este tipo de espacios, sobre todo en Palma donde el problema de la falta de vivienda asequible es más extremo"

El coliving es una alternativa de alquiler de vivienda en la que los residentes comparten un espacio de vida, al igual que las áreas comunes y servicios y otra parte del espacio del edificio es privado.

Suele ser más muchísimo más económico que vivir solo, ya que los costos se distribuyen entre los inquilinos. Además, ofrece una mayor cantidad de comodidades y servicios que un alquiler tradicional, como mobiliario, limpieza, lavandería, gimnasio y espacios de trabajo compartidos.

Una de las principales ventajas del coliving es la creación de una comunidad colaborativa. Los residentes suelen ser personas jóvenes profesionales, emprendedores o nómadas digitales que buscan establecer conexiones y relaciones sociales. Es más coliving fomenta el intercambio de ideas, la colaboración y la creación de redes, lo que puede resultar en oportunidades profesionales y personales.

Además de la comunidad social, el coliving también proporciona un ambiente de apoyo. Al vivir con otros inquilinos, se pueden compartir las responsabilidades del hogar, lo que puede liberar tiempo y energía para enfocarse en otras actividades. También se puede disfrutar de un mayor nivel de seguridad, ya que la mayoría de los proyectos de coliving cuentan con servicios de seguridad y vigilancia las 24 horas del día.

El coliving también permite a los residentes una mayor flexibilidad y movilidad. En lugar de comprometerse con un contrato de arrendamiento a largo plazo, el coliving ofrece contratos flexibles que permiten a los inquilinos mudarse fácilmente de una ciudad a otra o cambiar de proyecto de coliving sin las restricciones de un contrato tradicional.

Según explica Alberto Luengo: "El desarrollo de proyectos de este tipo en Palma permitiría resolver el problema habitacional al que se enfrentan no solo colectivos como estudiantes o personas mayores sino otros como profesores, funcionarios de otras comunidades o por ejemplo policias. Para estos casos son soluciones temporales que harían compatible poder trabajar aquí y tener un techo digno. Esto además tendría una repercusión positiva en el mercado inmobiliario ya que quidaría parte de la presión y la demanda existente sobre el alquiler tradicional".

A pesar de estas ventajas, el coliving se enfrenta a desafíos regulatorios. Muchas ciudades no tienen regulaciones específicas para este tipo de proyectos, lo que puede generar incertidumbre legal y dificultar su desarrollo y crecimiento. La falta de normativas claras sobre la densidad de ocupación, los requisitos de seguridad y el uso de la propiedad puede llevar a conflictos con las autoridades locales y dificultar la obtención de permisos para la creación de nuevos proyectos de coliving.

En España solo existe un marco normativo con la finalidad de responder a la problemática y es el Decreto presentado por la Generalitat catalana, de medidas urgentes para estimular la oferta de las viviendas de protección oficial y las de nuevas modalidades para el
alojamiento.

Este decreto Ley, una de las perspectivas que reúne es la de regular el sector del coliving. Dicho decreto hace referencia al coliving como: “alojamientos con espacios comunes complementarios” y son admitidos de manera expresa su implantación en el suelo destinado para el
planeamiento de vivienda. A su vez se establecen aquellas condiciones mínimas que deben reunir los espacios comunes y privativos.

En esta normativa se establecen las superficies mínimas que deberán reunir aquellos espacios privativos y comunes. En concreto se dicta que, cuando la actividad de coliving ocupe la totalidad del edificio, estará prohibida la división de este en propiedad horizontal para fomentar su alquiler. Si es el caso que la actividad de coliving ocupa solo parte del edifico ya en propiedad horizontal, se debe configurar a dicha superficie como un único elemento privativo y diferenciado totalmente de los demás elementos que integren el mismo régimen de propiedad horizontal, como por ejemplo locales, etc.

Albert Luengo comenta, en este sentido, que "sería muy interesante que Baleares se regulara y en concreto en Palma por la necesidad, se hiciera aprovechando la tramitación del nuevo Plan General. Si no se regula adecuadamente no se pueden ejecutar proyectos ya que por una parte chocarían con la oferta turística y hotelera ya que no son establecimientos de este tipo y por otra con las viviendas al uso por que tampoco no son tales".

Hay que tener en cuenta, además que en muchos casos, la falta de regulación también ha llevado a la ausencia de estándares de calidad y profesionales en el sector del coliving. Esto conlleva riesgos para los inquilinos, ya que no existen garantías de la calidad de los espacios, servicios y condiciones de vida.

Para abordar estos desafíos regulatorios, es fundamental que los gobiernos locales trabajen en la creación de normativas claras y específicas para el coliving. Esto permitiría un crecimiento ordenado y sostenible de este modelo de vivienda, protegiendo los intereses de los inquilinos y promoviendo la integración de proyectos de coliving en el tejido urbano.

El Coliving: una solución de vivienda innovadora sin regulación en Mallorca