viernes. 19.04.2024

Al momento de gastar, siempre surge una duda importante, ¿pagar de contado, o solicitar crédito? Es una decisión que no debe tomarse a la ligera, ya que no solo puede tener un impacto directo en nuestro bolsillo, sino que además puede alterar nuestras finanzas a mediano y largo plazo, dependiendo de cuánto dinero estamos gastando.

Por eso, antes de sacar dinero de tus ahorros, o de aumentar tus niveles de deuda, es importante que conozcas algunos de los aspectos a tener en cuenta al elegir un método de pago. Estos son los siguientes:

  1. Determinar nuestra necesidad

¿Quieres comprar un móvil o costear tus vacaciones de verano? Lo mejor es utilizar el dinero que ya tienes en tu cuenta. Incurrir en nueva deuda debe reservarse solo para eventos importantes donde gastar grandes cantidades de dinero puede afectar el pago de otras responsabilidades.

Solo debes solicitar financiamiento bancario para gastos superfluos si tienes una cuenta bancaria estable y con suficiente dinero para hacer frente a la deuda sin desestabilizar tus finanzas.

  1. Estudiar nuestras finanzas

Endeudarnos cuando nuestra cuenta bancaria es estable y tiene suficientes fondos es muy distinto a hacerlo cuando nos encontramos en “números rojos”. Si bien las emergencias suelen limitar nuestras opciones, lo cierto es que no debemos incrementar nuestros niveles de deuda si no contamos con unas finanzas estables.

Por eso, no solo debemos tener un control férreo sobre nuestras finanzas (incluyendo ingresos, egresos y metas financieras de cara al mediano y largo plazo), sino también contar con ayuda profesional cuando no tengamos más opción que solicitar financiamiento bancario.

  1. Conocer los tipos de interés

No es lo mismo acceder a un préstamo con intereses del 3%, que a uno cuyos intereses sobrepasan el 20%. Esto varía según el tipo de producto financiero (préstamo al consumo, hipoteca, minipréstamo, entre otros), pero también de acuerdo a la situación económica, por ejemplo, en la Eurozona los préstamos se han encarecido en consecuencia al incremento de tipos por parte del Banco Central Europeo.

Mientras que acceder a un crédito con intereses bajos puede ser atractivo, especialmente si tenemos suficiente dinero para cancelar la deuda en poco tiempo, solicitar un crédito con intereses muy altos puede llevarnos a desestabilizar nuestras finanzas a mediano y largo plazo.

Para conocer más sobre cuándo usar nuestros ahorros y cuándo optar por un préstamo, los especialistas de Finbino publicaron una guía donde comparten algunas de las principales ventajas y desventajas de cada forma de pago.

  1. Crear un historial crediticio

Pagar de contado casi siempre es la mejor opción, excepto cuando queremos crear (o mejorar) nuestro historial crediticio. Es importante contar con uno, ya que este puede incrementar nuestras posibilidades de acceder a financiamiento bancario, así como de obtener beneficios adicionales para nuestras cuentas bancarias.

Si tienes suficiente dinero para pagar tus deudas, y las tasas de interés son aceptables, solicitar un préstamo puede ser una buena idea si quieres mejorar tu imagen ante posibles prestamistas.

  1. Necesidades empresariales

Cuando un negocio estable se encuentra en fase de expansión, suele recomendarse que lleven a cabo el proceso mediante financiamiento bancario, evitando tocar el flujo de caja. Esto mantiene estables nuestras finanzas al momento de realizar gastos como el pago de nómina o la reposición de inventario, y nos permite crecer cancelando la deuda de forma escalonada.

Sin embargo, solo se recomienda solicitar préstamos para inversiones empresariales cuando nuestro negocio esté en una posición de crecimiento financiero real.

Como puedes verlo, no existe una mejor opción entre el pago de contado y la solicitud de financiamiento, sino que cada opción debe adaptarse tanto a tus finanzas, como a tus necesidades y a la situación económica del país.

 

Crédito o de contado, ¿cómo saber qué opción es mejor?