Esa medida en concreto, que se aplica ya en países como Alemania o Austria, persigue facilitar que los conductores ganen experiencia circulando y forma parte de una batería de propuestas legislativas que, en última instancia, buscan contribuir al objetivo de eliminar las muertes por accidentes de tráfico en la Unión Europea en 2050.
La iniciativa se aplicaría a vehículos de categoría B (coches y furgonetas) y también de categoría C (camiones) para facilitar el acceso a la profesión de conductor a gente joven.
"Reducir el umbral de edad para la formación puede hacer una carrera en el sector del transporte más atractivo para los jóvenes, ayudando así, con el tiempo, a paliar la escasez de profesionales conductores, sin comprometer la seguridad vial", razona la Comisión Europea.
El Ejecutivo aboga, además, por adaptar los exámenes para que los futuros conductores estén mejor preparados ante la presencia de usuarios vulnerables como peatones y ciclistas, cada vez más frecuentes en la transición hacia una movilidad urbana más sostenible.
Bruselas despliega esa y otras medidas en tres propuestas legislativas que tendrán que negociarse con los Estados miembros a través del Consejo de la UE y con el Parlamento Europeo.
Plantea también establecer un período de "tolerancia cero" con el alcohol entre los nuevos conductores hasta que tengan al menos dos años de experiencia rodada, ya que entre 2017 y 2020, por cada 100.000 conductores novatos en la UE hubo un promedio de 10 muertes, mientras que por cada 100.000 conductores experimentados se registraron sólo 3 decesos.
Los jóvenes representan sólo al 8% de los conductores pero suponen el 16% de los 20.000 fallecidos en accidentes de tráfico cada año en la UE.
La Comisión, no obstante, no propone una armonización de los límites de alcohol en sangre en toda la UE, ya que no tiene competencias para ello.
INFRACCIONES
Actualmente, el 40% de las infracciones de tráfico cometidas en un Estado miembro distinto al que se reside se archiva, bien porque no se puede identificar al conductor o procesar el pago y la Comisión quiere corregir esa laguna.
"Los que conduzcan de forma peligrosa no deberían de poder salirse con la suya", dijo en rueda de prensa la comisaria europea de Transporte, Adina Vaelan.
La Comisión quiere, de entrada, que la retirada del permiso de conducir en un Estado miembro implique automáticamente que esa persona no pueda conducir en ningún país de la Unión Europea.
Según las normas actuales, cuando una infracción grave da lugar a una inhabilitación para conducir, esa penalización no puede ejecutarse en toda la UE si el conductor cometió la infracción en un Estado miembro distinto del que expidió su permiso de conducción.
En esa misma línea, Bruselas propone también reforzar los procedimientos para el intercambio de información sobre seguridad vial entre los Estados miembros.
La Comisión Europea quiere que la legislación actual sobre información transfronteriza, que incluye infracciones como exceso de velocidad o conducción bajo los efectos de las drogas, se extienda también a casos de conducción sin mantener distancia de seguridad, adelantamiento peligroso, conducción en sentido contrario o usar vehículos sobrecargados.
CARNÉ DIGITAL
La Comisión quiere crear además una versión digital europea del permiso de conducir, que sería el primero de su tipo en el mundo y que facilitaría también que ciudadanos de fuera de la UE pudieran convalidar sus permisos extranjeros en territorio comunitario.