jueves. 28.03.2024

 

Mariano Rajoy atiende a EconomíadeMallorca en vísperas de su llegada a Palma de Mallorca, donde tiene programados actos electorales este miércoles. El presidente del Gobierno en funciones hace un repaso de los logros y hallazgos de su partido, sobre todo en materia de empleo, turismo y ayudas a la contratación para empresarios, y se marca retos para la próxima legislatura en caso de salir re-elegido para un segundo mandato.

 

El Govern balear lleva quejándose de que siendo la tercera comunidad que más aporta al Estado está entre las más rezagadas en financiación. ¿Mejorará la financiación autonómica de las Islas si es reelegido presidente? ¿Hay margen para compensar a las comunidades que más aportan?

Cabe recordar que el actual sistema de financiación autonómica fue aprobado por un Gobierno del PSOE en 2009, con el apoyo de muchos de los que hoy lo critican. El PP siempre estuvo en contra de este sistema, por lo mucho que de confuso e inestable tenía, sobre todo en el contexto de una profunda crisis que se veía inminente, aun cuando los gobernantes de entonces la negaban.

 

A Baleares, como a todas las Comunidades Autónomas, le interesa un sistema más claro y más equitativo. Para ello vamos a trabajar en la próxima legislatura, una vez que hemos superado la situación financiera crítica por la que pasaron muchas Comunidades Autónomas, gracias a las medidas extraordinarias de liquidez puestas en marcha por el Gobierno. Ahora mantendremos reuniones con todas las Comunidades Autónomas para consensuar un nuevo sistema de financiación autonómica.

 

¿Se atenderían mejor estas reivindicaciones si en lugar de la presidenta Armengol hubiera un presidente del Partido Popular?

Mi Gobierno atiende al interés general de todos los españoles, con independencia del signo político del gobierno autonómico. De hecho, hemos llegado a acuerdos importantes con los gobiernos de Baleares, tanto el presidido por el Sr. Bauzá como por la Sra. Armengol, con la que me reuní en septiembre de 2015 para tratar muchos de los asuntos que importan a esta comunidad.

 

Como ejemplo, le recuerdo la firma con el gobierno balear, presidido por la Sra. Armengol, de dos importantes protocolos de apoyo financiero a determinadas actuaciones inversoras, por valor de 266 millones de euros, principalmente en el ámbito de carreteras y turismo en diciembre de 2015.

 

Por tanto, el Gobierno mantiene una actitud siempre favorable a continuar colaborando con la región en todas las cuestiones que importan a los ciudadanos de Baleares. Ese interés general es el que debe presidir nuestras políticas y es el que guía al Partido Popular. Nosotros trabajamos por mejorar la economía, crecer, crear empleo y por el bienestar de los ciudadanos y creo, sinceramente, que queda mucho por hacer, pero Baleares se ha beneficiado de las reformas impulsadas por el Gobierno y hoy su economía crece fuertemente (un 3,2% en 2015), bate records de turismo, con 11,6 millones de turistas internacionales que visitaron las islas el año pasado, y ha logrado revertir la situación del mercado trabajo y crear empleo a tasas muy positivas. Por eso hay que mantener el rumbo y no revertir estas políticas, ni tomar decisiones como algunas que estamos viendo en el Govern que no me parecen las más acertadas.

 

¿Qué implicaría para España económicamente un pacto de izquierdas en estos momentos?

Mi opinión, y la de muchísimos agentes nacionales e internacionales, es que un pacto de izquierdas sería profundamente negativo. Nos jugamos mucho el próximo domingo. Nos jugamos que el esfuerzo de los últimos años, que está dando sus frutos y ha generado oportunidades y empleo para más de un millón de españoles en los dos últimos años, se eche abajo con una vuelta a las políticas que nos colocaron al borde del abismo. Nos la  jugamos todos: se trata de elegir entre un porvenir de prosperidad, de estabilidad económica y de creación de empleo, con un gobierno sensato y solvente al frente; o un futuro de incertidumbre, de extremismos y de políticas que ya han demostrado sus malos frutos, en España y fuera de España.

 

La compensación de la insularidad es una de las grandes asignaturas pendientes en Baleares. ¿Si vuelve a ser presidente aprobará al fin la tarifa plana en los vuelos interislas?

Soy consciente de que la insularidad es un obstáculo, en términos de cohesión social y territorial. Pero mi Gobierno no se ha quedado con los brazos cruzados. Hemos hecho un esfuerzo muy importante por compensar el coste de transporte por la insularidad, además en un entorno económico y presupuestario muy complicado. De hecho, hemos destinado a garantizar la conectividad de las personas y mercancías con Baleares casi 500 millones de euros entre 2012  y 2015  y en 2016 vamos a destinar más de 130 millones para subvencionar el 50% del coste de los billetes de transporte aéreo y marítimo de los residentes en Baleares, subvencionar el transporte de mercancías con las islas y para atender la Obligación de Servicio Público de la ruta aérea Menorca-Madrid.

Debemos tener en cuenta que los residentes en Baleares han podido realizar casi 16 millones de viajes entre 2012 y 2015 y de cada euro, la mitad lo pagan los Presupuestos Generales del Estado.

 

En cuanto a la tarifa plana, apostamos por la tarifa plana. Es un tema que estamos estudiando junto con el Gobierno de Baleares y el de Canarias, pero la decisión no depende solo de nosotros, porque la Comisión Europea debe aprobar la medida después de analizar sus efectos sobre el tráfico aéreo y sobre la competencia, tanto dentro del sector aéreo, como con otros modos.

 

En materia turística todos los datos indican que será una temporada excepcional pero aquí en Baleares se habla de poner límites y ordenar tanto la llegada de turistas como por ejemplo de cruceros, ¿Qué piensa de estas medidas? ¿De qué manera se puede mantener el equilibrio entre el turismo y la sostenibilidad?

España es una potencia turística de primer orden a nivel mundial, por lo que el Gobierno ha tenido claro, desde el primer momento, que el turismo debía ser una prioridad, lo que motivó la aprobación del Plan Nacional Integral de Turismo, la columna vertebral de la reforma turística.

 

En cuanto a las medidas implantadas o insinuadas por el Gobierno balear para gravar y desincentivar el turismo, mi posición es clara: no podemos poner obstáculos al turismo, cuando el objetivo es seguir creciendo para poder generar más empleo1, cuando somos una potencia turística mundial y cuando se puede apostar por modelos que compatibilicen desarrollo y crecimiento sostenible. Desde luego, como no se crea empleo ni riqueza es poniendo trabas: cobrando una ecotasa a los turistas, limitando la llegada de cruceros, o prohibiendo las terrazas de los establecimientos de restauración en unas islas con tan buen clima.

 

La clave para el futuro es seguir trabajando en políticas integrales, a medio y largo plazo, que garanticen la sostenibilidad de nuestro modelo turístico, algo que pasa por mantener la inversión y proseguir con la modernización de los destinos. Y lo estamos haciendo bien: las cifras arrojan resultados históricos y, además, estamos consiguiendo que el turismo sea cada vez menos estacional.

 

En Baleares estamos viviendo denuncias por explotación laboral de los trabajadores y precariedad laboral especialmente en el sector turístico con las condiciones de las camareras de pisos. ¿Qué va a hacer si es reelegido presidente para que no se repitan estas situaciones?

El turismo debería vincularse a la calidad, calidad en todos los sentidos, también en el empleo. Y en España no sólo tenemos una legislación laboral avanzada; también velamos por la seguridad, y sobre ello la Inspección de Trabajo ha realizado una extraordinaria labor durante estos años. Ha realizado casi 900.000 inspecciones y aflorado más de 350.000 empleos que ahora disfrutan de todos los derechos. Nuestro proyecto por un empleo de mejor calidad implica seguir trabajando para que las condiciones laborales sean cada vez mejores y más seguras.

 

Desde el Govern balear se insiste a los empresarios en que es hora de subir los salarios para hacer llegar la recuperación económica a los trabajadores. ¿Comparte esta petición?

Entre todos hemos logrado que en estos años Baleares haya recuperado ya 9 de cada 10 empleos destruidos durante la crisis. En Baleares, hemos avanzado en el primer objetivo, que era la vuelta del empleo. Ahora tenemos que avanzar mejorando su calidad. Eso implica muchas cosas: estabilidad, formación, respeto de los derechos de los trabajadores. Y la calidad también afecta al dinero que finalmente el trabajador tiene en el bolsillo. Los salarios los fijan los empresarios en negociación colectiva, pero el Gobierno ha implementado dos políticas decisivas para mejorar la capacidad adquisitiva de los trabajadores. La primera, bajar el IRPF. Lo hemos hecho en dos ocasiones y lo volveremos a hacer. Y, la segunda, controlar la inflación, que ha permitido que los trabajadores ganen poder adquisitivo en 2014 y 2015 y estén ganando poder adquisitivo otra vez en lo que llevamos de 2016.

 

La verdadera forma de hacer llegar la recuperación económica a los trabajadores consiste en crear empleo de calidad. Nosotros hemos impulsado una reforma laboral que ha revertido un proceso de destrucción de empleo como nunca se había dado en España, y hemos impulsado una reforma fiscal que ha beneficiado especialmente a las rentas medias y bajas. Sólo con estas dos reformas, el poder adquisitivo de la sociedad se está recuperando de un modo sostenido.

 

A partir de aquí, de un entorno legal estable, esperamos que la actividad económica crezca progresivamente, de modo que las subidas salariales lleguen asociadas a incrementos en la productividad y por acuerdo entre los agentes sociales.

 

Los empresarios baleares se quejan de falta de estímulos para la contratación de trabajadores ¿Qué piensa hacer ante ello?

Hemos puesto en marcha algunas medidas importantes para estimular la contratación como la Tarifa Plana para la Contratación Indefinida, o como un mínimo exento a la contratación de los primeros 500 euros. Los datos muestran que estas medidas están funcionando. Hemos creado más de un millón de empleos en los últimos dos años y es la primera vez que iniciamos una recuperación con incrementos en la contratación indefinida. Y, por eso, en el programa electoral del Partido Popular anunciamos que vamos a reforzar estas medidas.

 

Además, se ha consolidado el apoyo a través de bonificaciones a la Seguridad Social para favorecer la contratación de trabajadores vinculados a la industria turística durante los meses de febrero, marzo y noviembre y que ha sido muy importante sobre todo en Baleares.

 

Con las encuestas en la mano parece que su partido puede estar condenado a entenderse con Ciudadanos. Albert Rivera ya ha trazado una línea roja pidiendo para pactar que de usted un paso a un lado.

Ya he dicho que yo estoy dispuesto a dialogar y a pactar con los partidos moderados con los que compartimos los grandes principios, pero sin exclusiones, y mucho menos de carácter personal. No se trata de personalismos, sino de acuerdos programáticos beneficiosos para los ciudadanos.

 

Lo que resulta inédito, y además tiene poco de regeneración y menos de democrático, es que un partido le imponga el líder o el candidato a otro que le triplica en escaños. O que se pretenda excluir al candidato que resulta ser el más votado por los españoles con amplia diferencia sobre cualquier otro.

 

¿Contempla este escenario? ¿En tal caso, estaría dispuesto a planteárselo antes de llegar a unas terceras elecciones?

Confío en que no se llegue a ese escenario, porque mantener esta situación de interinidad no sería bueno para nadie. España necesita un Gobierno estable que afronte los importantes retos que tenemos por delante y consolide la recuperación que, afortunadamente, es ya una realidad, pero queda mucho por hacer. Los ciudadanos no se merecerían nuevos vetos que imposibiliten que pueda gobernar un partido que gana holgadamente las elecciones y, además, en la inmensa mayoría del territorio nacional.

 

Llegado el caso, ¿Estaría dispuesto a hacer presidente a Pedro Sánchez para evitar un gobierno que ustedes definen como 'populista'?

No parece que se vaya a dar el caso de que Pedro Sánchez encabece la lista más votada. Si así fuera, no tendría  ningún problema en hacerlo. Por lo mismo, espero que la responsabilidad de ahorrarle a España un bloqueo o un gobierno de radicales sea una prioridad también para Sánchez.

Mariano Rajoy: "No se crea empleo ni riqueza poniendo ecotasas o limitando los cruceros"