Así se desprende del ‘Análisis de coyuntura de las Illes Balears’ correspondiente al primer trimestre del año, que han presentado el vicepresidente del Govern, Antoni Costa, y la directora general de Economía y Estadística, Catalina Barceló.
El primer trimestre del año muestra una reactivación del crecimiento interanual en las Illes Balears, lo que duplica el crecimiento de 2019 y supera con creces la mejora a escala nacional, que es del 2,4%. Todas las islas colaboran en esta subida, con especial mención en las Pitiusas, que crecen un 4,8%, seguidas de Mallorca, con el 3,1% y Menorca, con el 2,7%.
El fuerte dinamismo del sector servicios continúa impulsando el crecimiento, con una subida del 3,6% gracias a una notable intensificación de las ventas (un 8% frente al 0,5 % de aumento nacional). También mejoran la agricultura y pesca (3,2 %) y la construcción (1,7%).
El único sector que experimenta un descenso es la industria y la energía, con una caída del 3,7 %, sobre todo por la escasa actividad de marzo. Sin embargo, las cifras de abril se recuperan, lo que indicaría que se trata de un descenso puntual.
Por lo que respecta a la inflación, en los últimos tres meses se rompe la tendencia a la baja, con una variación anual del 3,8%, similar a la nacional, del 3,6 %. La alimentación, la restauración y la vivienda son las partidas que protagonizan principalmente el encarecimiento de precios.
El informe también confirma que el turismo crece en valor, con un nuevo récord en gasto turístico, puesto que sube un 8,1% el gasto por persona y día (161 euros), con una variación anual del 13, %, un gasto medio por persona de 1.023 euros hasta un total de 2.797,9 millones de euros.
Esto supone una subida del 40% entre 2016 y 2024. También se crece en menor medida en volumen, con 2,7 millones de turistas hasta el mes de abril ─ un 7,4 % más ─, con casi tres de cada cuatro visitantes extranjeros (un 72,3%). Hay que destacar cómo las llegadas de turistas durante los meses de enero, febrero y marzo han aumentado a dos dígitos, lo cual refleja una mayor desestacionalización en la temporada baja.
Además, aumentan las pernoctaciones hoteleras, con una subida del 18,5% hasta conseguir 5,9 millones en el primer cuatrimestre del año, y los días de estancia, con una media de 4,4. Según los datos del Instituto de Estadística de las Illes Balears (IBESTAT), los ingresos por habitación han crecido un 63,2% entre 2016 y 2024, pasando de 48 euros en 2016 a 78 euros en 2024, lo cual reflejaría cómo se ha incrementado la productividad del capital en este sector.
Asimismo, los aeropuertos continúan incrementando el tráfico de pasajeros, con una variación anual del 5,3% hasta llegar a 4,2 millones de viajeros en el primer cuatrimestre.
Respecto de la vivienda, la compraventa de casas se sitúa en niveles de 2016, con 3.167 adquisiciones, lo cual supone una caída del 20,6%. Además, la obra residencial continúa activa, aunque muestra síntomas de agotamiento, con niveles similares a 2019 medido a través de los certificados de final de obra ─ 562 en total ─ y un descenso del 25,3%.
Por su parte, el mercado laboral continúa en máximos, con 622.275 trabajadores afiliados de media en mayo. La afiliación en servicios consigue un nuevo récord, con 510.120 trabajadores en mayo, lo cual supone el 82 % del total después de una crecida del 4 %.
También hay plusmarca en la construcción, con 62.385 afiliados y un crecimiento del 1,2 %, y en la industria, con 31.318 afiliados y una variación anual del 1,5%. La agricultura y la pesca completa el póquer de crecimiento ocupacional con 3.677 afiliados y una subida del 2,6%.
Finalmente, Costa ha destacado como gran reto la mejora de la productividad y su relación con el bienestar de los ciudadanos. «Tenemos que mejorar el PIB per cápita, como indicador tradicional de medida del bienestar, y para ello hay que recuperar la competitividad y mejorar la productividad sectorial», ha señalado.
Con este objetivo se ha puesto el foco en analizar cómo se comporta cada sector para enfocar las estrategias políticas más eficientes. El conseller de Economía, Hacienda e Innovación ha destacado también que la productividad aparente del trabajo en 2022 fue superior a la española en el 45% de las horas, gracias a los sectores de comercio, hotelería y transporte, actividades financieras y actividades profesionales.
Respecto a la productividad del trabajo, que es uno de los componentes que miden la productividad total, el informe confirma que ha decrecido un 2 % en los últimos 27 años. Entre 1995 y 2005 se fue reduciendo, aunque seguía situada por encima de la española, mientras que a partir de 2006 fue recuperándose levemente y alineándose con la nacional.
«Tenemos que continuar mejorando con el incremento de la formación, la mejora de la especialización, la apuesta por la simplificación administrativa y la reducción de burocracia y el fomento de la flexibilidad laboral, vinculada a la conciliación y la corresponsabilidad, entre otras propuestas para incrementar esta productividad del trabajo», ha explicado el vicepresidente.
Costa también ha subrayado la necesidad de mejorar la productividad del capital – que incluye por ejemplo la compra de maquinaria ─-, cuya evolución ha caído un 42,6 % desde 1995 en el archipiélago y desde 2002 está por debajo de España.
«Tenemos que impulsar la innovación y la inversión tecnológica, tecnificar de una vez por todas las empresas y las administraciones públicas, invertir en sectores productivos, diversificar las actividades sectoriales o invertir en el capital natural y en infraestructuras, entre otras medidas. Además, hay que invertir mejor y de forma más eficiente», ha concluido el vicepresidente.