viernes. 19.04.2024

Cuando se trata de planificar la boda de tus sueños y comienzas a sumar todos los gastos, es normal que comiences a buscar la manera de reducirlos. ¡Son demasiados!  Sin embargo, cuando se trata de capturar para siempre las imágenes de ese día único y especial,  aquí te dejo 3 razones para no escatimar en la fotografía de tu boda. Después de leerlos seguro que te decidirás por contratar un fotógrafo profesional, en lugar de preguntarle a tu amigo o a alguien de la familia que se compró una nueva cámara por navidad y quiere practicar. Nosotros que nos encontramos en Mallorca, tenemos claro que contratar un fotógrafo de bodas en Mallorca para estos eventos es siempre un acierto.

 

Hacer buenas fotografías es mucho más que tener una cámara cara

De la misma manera que un artista usa un pincel, un carpintero usa un martillo y un escritor usa un bolígrafo, el fotógrafo usa una cámara. Pero estas son solo las herramientas, lo importante es la forma en que la persona usa sus herramientas para producir creaciones asombrosas.


Necesitas alguien que sepa usar realmente la cámara, que tenga la experiencia de tomar fotos con diferentes luces, diferentes condiciones, formación en composición fotográfica, postproducción, edición de imagen, etc.... La cámara no hace esto, el fotógrafo hace esto y ha desarrollado sus habilidades y conocimientos a través de años de experiencia y muchas horas de estar disparando. Con estos conocimientos obtienes consistencia, no sólo  una o dos fotos impresionantes, sino un álbum completo que vale la pena para el resto de tu vida.

 

Un amateur terminará dándote mucho más trabajo

Un fotógrafo profesional con años de experiencia en la captura de bodas, sabrá las tomas clásicas que hay que disparar, sabrá dónde y cómo estar en el momento adecuado. Puedes relajarte y  dejar que el profesional continúe con su trabajo con total confianza sabiendo que estará justamente donde tiene que estar y que hace lo que tiene que hacer.

 

También anticipará lo que sucederá a continuación, conocerán cómo funciona el flujo del día, ya habrá encontrado el lugar perfecto para esas lindas fotos de novios, conocerá la ubicación ideal en la iglesia con el telón de fondo perfecto. El día de la boda no es una sesión de fotos, es un evento dinámico con una sola oportunidad de capturar esos momentos. Déjalo en buenas manos.


 

Al final, son todos los recuerdos con los que contarás

Una vez que termina la boda, hay mucha emoción por ver las fotos. Es la oportunidad de revivirlo todo nuevamente mientras buscas momentos del día que puedes haber perdido, expresiones y momentos divertidos de los invitados, etc... Cuando termine el gran día, aparte de los recuerdos en tu mente, todo lo que te quedarán para siempre serán las fotografías. Fotos y fotos que atesorarás con mimo y mostrarás a amigos, familiares y nietos. Asegúrate de que sean recuerdos positivos y bellos, no un permanente recuerdo de “ ojalá hubiésemos invertido en un fotógrafo en condiciones, en lugar de confiar en el amateur de mi primo”.

 

Contratar a un fotógrafo de bodas no es un costo, es una inversión.

3 razones por las que deberías contratar a un fotógrafo profesional de bodas