La semana santa siempre ha sido el pistoletazo de salida de la temporada vacacional en España. Con la llegada de la primavera, nuestros hoteles de temporada vuelven a abrir las puertas a todos esos viajeros, nacionales e internacionales, que eligen nuestros destinos para disfrutar de sus vacaciones.
Pendientes de confirmarlo cuando pasen estos días y tengamos los datos reales del negocio generado en Semana Santa por parte de nuestros hoteles, ya podemos adelantar que, como muchos hemos ido anticipando, la perspectiva turística es positiva.
Por nuestra parte se espera mejorar los datos de venta en más de un 20% respecto al mismo periodo de 2019, un año de referencia bastante positivo para nuestra industria.
Un año más, son nuestros hoteles vacacionales de España los que destacan especialmente en estas festividades. Aunque, es cierto que se esperan cifras bastante favorables para los hoteles urbanos ubicados en las principales ciudades del país, como Valencia, Sevilla, Barcelona o Palma, de son tradicionalmente los destinos vacacionales de costa los más atractivos para épocas vacacionales.
"Por nuestra parte se espera mejorar los datos de venta en más de un 20% respecto al mismo periodo de 2019"
En el segmento vacacional destaca el comportamiento de Canarias, donde los Hoteles mejoran su ocupación y las tarifas medias históricas.
En las Costas peninsulares recuperamos volúmenes que no pudimos ver el año pasado, gracias al empuje de los mercados internacionales, que sí que está llegando en 2023, y en las Islas Baleares, la federación Hotelera estimaba recientemente una ocupación cercana al 70% en Mallorca, pudiendo nosotros destacar la apertura de un mayor número de hoteles que en otros años por estas fechas, que nos permiten alargar temporadas.
Entre ellos destacan especialmente nuestros hoteles ubicados en Calviá, en la zona de Magaluf, donde hemos puesto nuestros todos esfuerzos para conseguir un turismo de calidad y atractivo también para el turismo local y nacional, siendo para estos días el turista español la segunda nacionalidad con más presencia en nuestros hoteles de dicha zona, después del británico.
¿Será todo esto la señal de que viviremos un positivo verano para el turismo? Por el momento, todo indica que así será. Y no solo es una señal que vemos los hoteleros también es algo que se está viviendo por parte de aerolíneas y, en gran parte, gracias a la vuelta de la conectividad aérea. Y es que esta conectividad, exceptuando los casos de un par de países, ya se encuentra en niveles prepandemia, algo fundamental para garantizar un fuerte retorno del turista internacional a España.
El Caribe, destino vacacional por excelencia que vuelve a brillar
Llegada la Semana Santa es inevitable hablar de las previsiones turísticas en España, pero no debemos olvidarnos de otros destinos internacionales que, si las previsiones se cumplen, también vivirán temporadas históricas para su turismo.
La atracción del talento, el gran reto para el sector
El turismo ha emprendido con gran fortaleza su recuperación, ofreciéndonos una oportunidad de impulso económico tras la pandemia, con un sector que prevé volver a crecer por encima del PIB global hasta el año 2030. Sin embargo, nos vemos con un gran reto que está afectando de manera especial al turismo: la atracción del talento.
El cierre prácticamente total que sufrió nuestro sector durante la pandemia produjo otro nefasto efecto indirecto: la desconexión con muchos de nuestros empleados fijos-discontinuos, su decepción ante la vulnerabilidad demostrada por nuestra industria, y finalmente la “fuga” de una parte del joven talento cualificado hacia otros sectores.
A ello se añaden otros factores disfuncionales como la oferta descontrolada de alquiler vacacional, que ha provocado en ciudades y zonas vacacionales una inflación residencial y en la práctica, la imposibilidad para los trabajadores de temporada para encontrar una vivienda digna, un problema que se agrava en territorios limitados como las Islas Baleares.
La escasez de personal cualificado es una realidad y con cada vez una mayor competencia entre compañías para conseguir atraer el talento, nos vemos ante un gran riesgo para nuestro sector, ya que para nosotros las personas son esenciales. Como siempre ha dicho mi padre y me habéis oído repetir muchas veces: las personas son el mayor activo de Meliá Hotels International.
Son ellas las que consiguen que nuestra compañía funcione y también forman, siendo la vocación de servicio uno de nuestros valores, un gran parte de la experiencia que nuestros clientes viven durante su estancia. Por ello, además de anticipar programas de reclutamiento en zonas sensibles e intensificar nuestra relación con escuelas y universidades, desde nuestra Compañía hemos desplegado un intenso programa para reconectar con nuestros colaboradores después de la pandemia y para atraer y retener el talento, donde además de mejorar las condiciones y la experiencia del empleado, ofrecemos planes de formación y desarrollo e incluso, en algunas ocasiones, proporcionamos alojamiento, especialmente en zonas sensibles como las islas.
Aunque resultó fuertemente impactado por la pandemia global, el turismo es una industria con un inmenso potencial de crecimiento a largo plazo (superior a la media del PIB global para los próximos 10 años) y debe recuperar el atractivo laboral que siempre ha tenido. Somos una industria “de personas para personas” y por ello, reconectar con las nuevas generaciones de trabajadores será fundamental para que sigamos avanzando en la mejora de la calidad y sostenibilidad de nuestro turismo.