jueves. 28.03.2024

The future is now

El Gobierno ya ha presentado los presupuestos para el 2022 y vienen cargaditos… Algo que me preocupa a mis ya 50 años y como autónoma es el tema de los planes de pensiones. ¿Qué está pasando?

 

El año pasado la aportación máxima a los planes de pensiones individuales se bajó de 8.000 a 2.000 euros y en los nuevos presupuestos vuelve a bajar otra vez hasta los 1.500 euros anuales.

 

Os estaréis preguntando… ¿Y eso qué significa? Os lo explico: los planes de pensiones eran un instrumento bastante útil para rebajar la factura fiscal en la declaración de la renta. Imaginad a alguien con una nómina de 24.000 euros anuales que cada año mete en su plan de pensiones 2.000 euros. A la hora de calcular su IRPF se hace sobre 22.000 euros y no sobre los 24.000 que realmente gana esa persona. Eso supone un ahorro, que nunca viene mal.

 

Con los nuevos presupuestos para el 2022 los planes de pensiones individuales pierden fuelle ya que cada vez te puedes beneficiar menos de esa pequeña ventaja fiscal. Y es que el Gobierno necesita recaudar más impuestos como sea, aún perjudicando una vez más a la clase media.

 

No quiero entrar en temas políticos porque me caliento y además me aburre soberanamente porque al final hagamos lo que hagamos, nos convertimos en meras marionetas de nuestros gobernantes.

 

A mí lo que me preocupa es qué pasará con mi yo futuro. Cómo viviré de aquí a unos años: No confío ni de lejos en cobrar alguna cantidad decente del Estado y por supuesto lo que hasta ahora se planteaba como un complemento a la pensión pública está perdiendo su atractivo a marchas forzadas.

 

La política actual con respecto a los planes de pensiones es desincentivar las aportaciones a los planes individuales e incentivarlos si son planes que te ofrece tu empresa. Pero… ¿Qué ocurre con los autónomos/as?

 

Lo único que tengo claro es que no quiero perder poder adquisitivo, y los años que viva sin trabajar, me gustaría aprovecharlos a tope haciendo lo que más me guste. En definitiva, DISFRUTAR.

 

¿Cómo lo hago? No existen fórmulas mágicas. El futuro es ahora (como decían en el 2012 los Offspring). Si lo hago bien ahora, no tendré que preocuparme mañana. Por eso os voy a dar algunos consejos de esos que a mí me sirven por si queréis aprovecharlos:

 

  1. Para ahorrar, márcate un objetivo sexy. Si tu objetivo a futuro no te resulta atractivo, no ahorrarás.

 

  1. Planifícate. Construye tu propio mapa financiero-vital. Sé consciente de dónde estás, en qué etapa de tu vida y dónde quieres llegar.

 

  1. Calcula cuánto dinero necesitas para mantener tu ritmo de vida. Eso te dará una idea de lo que tienes que ahorrar.

 

  1. Averigua cuál es tu ritmo financiero. La vida y sus circunstancias nos hacen bailar a ritmos distintos: algunas veces serás Rock & Roll, pero otras serás una de esas baladas romanticonas. Esto te vendrá muy bien a la hora de invertir.

 

  1. Invierte sólo en aquello que se adecúe a tu ritmo financiero y que además entiendas. No te metas en algo que desconoces porque le perderás la pista a ese dinero que te cuesta tanto ahorrar.

 

  1. Averigua qué opciones se ajustan más a tu perfil. Verás, a la hora de ahorrar existen muchas alternativas y dentro de éstas algunas estarán más alineadas contigo. Por ejemplo, dentro del universo de los fondos de inversión, si te preocupa el medioambiente, existen fondos que además de darte una rentabilidad, invierten en su protección.

 

  1. Conviértete en el dueño/a de tu “money” para conseguir vivir el mañana como si fuera hoy. Con eso me refiero a no perder poder adquisitivo y disfrutar haciendo lo que más te guste.

 

Espero que estos consejos te ayuden a tomar la decisión de empezar a ahorrar ya. Tienes muchas opciones diferentes: seguro que encontrarás la tuya. Y si necesitas ayuda, ya sabes… Escríbeme a [email protected]

The future is now…

The future is now