viernes. 29.03.2024

Turismo, hagámoslo sostenible, regulando sin prohibiciones.

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El turismo que ha visitado tradicionalmente nuestras islas,  sobre todo a partir de la extensión del todo incluido, no ha sido precisamente de un perfil del que se haya beneficiado todo nuestro comercio. El turista de este perfil, no encaja con el que visita al pequeño comercio, mas bien no sale, o sale poco del establecimiento hotelero. A pesar de ello debo reconocer que se han hecho esfuerzos para cambiar este perfil sobre todo en temporada baja y potenciar, básicamente en Palma, el turismo relacionado con la cultura y el shopping.

 

Con ello pues veremos que el sector comercial de proximidad implantado en los núcleos urbanos no ha recibido, como la hostelería por ejemplo, las bonanzas de las temporadas turísticas históricas que estamos viviendo.

 

Ante ello ha surgido un nuevo turismo denominado vacacional, aunque suene redundante, es un turista que viene a descansar pero quiere estar literalmente como en su casa y por ello alquila casas, pisos o apartamentos para conseguir esta normalidad diaria pero en una ubicación diferente.

 

Este turista se integra mucho más, establece relaciones con su entorno, compra en el pequeño comercio y gasta más que el turista clásico de hotel. Además, y como se ha demostrado no sólo es turista de sol y playa y tampoco solo de verano, con lo que nos puede permitir alargar la temporada. Es más, el alquiler vacacional ha dado acceso a los municipios del interior de la Isla, olvidados turísticamente, a los beneficios de un turista más generoso que el tradicional y que hace uso del pequeño comercio tradicional y de proximidad en su viaje.

 

Ante semejante panorama ahora los políticos de nuestras islas se han embarcado en la aventura de aprobar una ley que regule “ con sentido común ” el alquiler vacacional en beneficio de TODOS. La iniciativa me parece muy loable, necesaria y valiente. Ahora bien, las formas no son las mas adecuadas. Esta bien, de cara a la galería, tener luz y taquígrafos y que la sociedad sepa todo lo que trabajan los políticos. Sin embargo lanzar debates abiertos con mensajes cruzados sin ton ni son, ya no me parece tan bueno. Hablar cada día de como será esta ley en los medios y sobre todo de una voluntad de restringir y de prohibir por sistema no me parece lo más lógico del mundo.

 

Necesitamos un consenso lo más amplio posible en cuanto a las medidas a tomar. Soy consciente de lo difícil que será sentar en una misma mesa y poner de acuerdo a colectivos tan distantes como hoteleros y la asociación de alquiler vacacional, pero no queda otra, hay mucho en juego. Todos debemos poner de nuestra parte.

 

Si se quiere un modelo de turismo sostenible, ciudades y pueblos equilibrados con presencia entre turistas y residentes, y si se quiere dar más cancha al comercio en el campo del turismo hay que ser serios y rigurosos. Tenemos una oportunidad histórica para salir ganando todos. Espero se aproveche.

Turismo, hagámoslo sostenible, regulando sin prohibiciones.