jueves. 25.04.2024

 

Los turistas estadounidenses que llegan a nuestro país están incrementando el valor de sus compras hasta un 42%, beneficiados por el bajo valor del euro al cambio por el dólar, si bien los chinos siguen siendo hasta marzo de 2016 los más significativos dentro del turismo de compras de ciudadanos de fuera de la Unión Europea, ya que representan el 36% de todas las adquisiciones, según el Barómetro del Turismo de Compras en España que elabora el operador Global Blue.

 

 

Este estudio, que compara los resultados del turismo de compras hasta marzo de 2016 respecto al año anterior, ofrece una perspectiva en la que destaca el dominio de valor de las compras de los chinos (36%) respecto al resto de nacionalidades: rusos y argentinos suponen un 6%, marroquíes un 4% y estadounidenses un 3%, con un 45% de otras nacionalidades.

 

 

El consumo de los turistas procedentes de Estados Unidos, crece un 42%, mientras los chinos y rusos permanecen estables y tan solo crecen los gastos de argentinos (un 101%, que Global Blue advierte que va a cambiar con las nuevas medidas del gobierno de Mauricio Macri) y marroquíes (incremento del 11%).

 

 

El gasto turistico en Baleares registra crecimientos del 21%, según el informe de Global Blue.

 

 

Entre las ciudades españolas, Barcelona sigue siendo la más significativa en cuanto al turismo de compras, ya que representa el 44% de las adquisiciones, seguida de muy cerca por Madrid, que abarca el 42%.

 

 

Sin embargo, resulta muy destacado el crecimiento de las ciudades del litoral Mediterráneo, que registran crecimientos del 21% respecto a marzo de 2015, y de Málaga, que aumenta el gasto en un 16% (aunque solo supone el 5% del gasto).

 

 

El turismo de compras en España es sinónimo de moda, un sector que acapara el 66% de las adquisiciones de los visitantes extranjeros a nuestro país. Su vitalidad es incontestable, con un crecimiento del 11% respecto a 2015. Con mucha distancia por detrás se ubica la joyería y relojería, que abarca un 19% de las compras y que está en retroceso, con una caída del 12% respecto al año pasado.

Los turistas estadounidenses aumentan su gasto en España por la debilidad del euro