jueves. 28.03.2024

El apalancamiento es una de las herramientas más poderosas que tienen los inversores para aumentar la rentabilidad. Puede amplificar las ganancias, pero en igual medida puede aumentar las pérdidas si no se tiene conocimientos sobre qué se trata el trading, por lo que se deben utilizar estrategias comerciales y de gestión de riesgos.

 

El apalancamiento, también conocido como comercio de margen, es el uso de una cantidad menor de capital para obtener exposición a posiciones comerciales mayores mediante el uso de fondos prestados. Es decir, en un apalancamiento, los inversores utilizan fondos prestados para comprar activos como acciones con margen. En este caso, el margen es la cantidad de capital que se requiere para abrir una operación.

 

En las transacciones de apalancamiento sólo pueden tener éxito si el rendimiento de la inversión es superior al valor del préstamo, por lo que es una alternativa de inversión atractiva para quienes no quieren pagar el valor total de la acción por adelantado o tener el activo “en manos”.

 

¿Cómo funciona el apalancamiento?

Cuando se negocia con margen, este suele expresarse como un porcentaje del valor total de la posición. Por ejemplo, los brokers de divisas pedirán el 1%, el 0,5% o el 0,25%, lo que te permite calcular el apalancamiento máximo al que se expondrá al abrir una operación. Por lo tanto, si metes 1000 euros y decides abrir una posición apalancada al 0,5%, tu exposición en el mercado sería de 200.000 euros.

 

Vamos con otro ejemplo. Un inversor comienza con 50 euros y pide prestados otros 50 para poder comprar 100 euros en acciones. Sea cual fuere el desenlace de las acciones, este inversor tendrá que devolver 50 euros al broker, más los intereses. Entonces, en el mejor escenario, las acciones suben su valor un 10%. El inversor devuelve los 50 euros prestados y se guarda los 60. Ganó 10 euros. Por el contrario, si las acciones caen un 10%, tendrá que devolver el dinero que le fue prestado, perdiendo 10 dólares sobre el capital inicial.

 

La clave para entender cómo el apalancamiento puede ayudar a generar lucros, pero también mayores pérdidas, es percibir que los fondos prestados son un pasivo fijo. Y otra clave será comenzar a operar con una relación que sea más baja que tu asignación máxima de apalancamiento. Esto permite a los inversores mantener sus posiciones abiertas por el tamaño completo, incluso si están experimentando rendimientos negativos.

 

Después de tanto azar, ¿el apalancamiento tiene alguna ventaja?

Sí, el apalancamiento puede ser una técnica muy beneficiosa si se entiende a la perfección de qué se trata. Estos son algunas de las ventajas:

  1. Invertir con menos capital: el apalancamiento brinda acceso a fondos adicionales porque estás pidiendo dinero prestado al corredor para obtener una mayor exposición al mercado de la que tendrías de otro modo. De esta forma, si todo corre bien, tendrás la posibilidad de obtener más ganancias. Entonces, aunque no dispongas de un gran capital inicial, aún podrás operar.

  1. Mayor exposición: no tienes que limitarte a tomar uno o varios lotes de cualquier opción de compra o venta solo porque no tienes dinero. Al estar expuesto a una posición mayor en el mercado, tienes la oportunidad de magnificar los rendimientos.

  1. Operar 24h al día: esto dependerá del tipo de mercado, sin embargo en el mercado de divisas o Forex, podrás operar a cualquier hora del día.

  1. Mayores ganancias: operar con apalancamiento permite obtener mayores ganancias cuando todo corre bien. Sólo tienes que poner una fracción del valor de la inversión para recibir el mismo beneficio que en una operación convencional. Los márgenes se pueden multiplicar sus beneficios en las operaciones exitosas

 

3 principales riesgos del apalancamiento

  1. Mayores Pérdidas: si la mayor ventaja eran grandes ganancias, del otro lado de la moneda tenemos mayores pérdidas. Si la operación no corre bien, puedes llegar a perder más dinero que el que has pedido para el apalancamiento ya que el desembolso inicial es comparativamente menor que el de las operaciones convencionales y es fácil olvidar la cantidad de capital que se está poniendo en riesgo. Al igual que el apalancamiento puede magnificar sus beneficios, también puede magnificar sus pérdidas.

  1. Gastos de financiación: recordemos que es posible operar las 24h del día. Pues bien, esto tiene un costo. Si quieres mantener la posición abierta durante la noche, deberás pagar una comisión para hacerlo.

  1. Llamada al margen: esto sería como una llamada de atención del broker para que deposites más dinero cuando las operaciones no están corriendo bien. Este dinero será para cubrir las pérdidas. Tu podrás añadir el capital o salir del todo.

 

El apalancamiento es ideal para quienes acostumbran negociar movimientos de precios a corto plazo y se ha convertido en una atractiva alternativa para quienes quieren acelerar las ganancias. Sin embargo, como puedes ver, este tipo de inversión puede ser contraproducente si no se sabe gestionar el riesgo.

 

Cuanto mayor sea el riesgo, más nivel de conocimiento es necesario. Siempre hay dos caras, y no hay que perder de vista los riesgos, ya que el trading con apalancamiento puede volverse en tu contra rápidamente.

Trading con apalancamiento: ¿realmente conviene?