viernes. 19.04.2024

Raúl Domínguez expone por primera vez en la Galería Pelaires. En sus dibujos, emplea múltiples recursos técnicos y diferentes registros gráficos. A partir de la acumulación de trazos, manchas y borrones, establece una relación entre las huellas y formas del paisaje y las propias del acto de dibujar. Situándose en el límite de la figuración, sus dibujos acaban siendo una textura que trae lo lejano y lo cercano a un mismo plano.

 

Temáticamente, surge un paisaje paradójico, en el que se superpone el tejido urbano, las áreas residuales y una naturaleza que no sabe muy bien dónde situarse. Las historias que en ellos suceden atraviesan la escena imprimiendo una sensación extraña y a la vez conocida.

 

Son imágenes de los espacios en los que las vivencias son inseparables de los demás elementos del paisaje, permitiendo en ocasiones situar en el centro de su relato acontecimientos periféricos, oníricos o insignificantes.

 

A landscape of the nature within (Un paisaje de la naturaleza interior) es una exposición colectiva que reflexiona sobre el atemporal tema del "paisaje"; en un sentido físico refiriendo al paisaje de la Sierra de Tramuntana que rodea nuestro Centro de Arte Contemporáneo de 4.000 metros cuadrados en la costa oeste de Mallorca; en un sentido metafórico aludiendo al paisaje del mundo del arte global, que se evidencia a través del renombrado Programa de Residencias para Artistas del CCA, que ya ha alojado a más de 600 artistas internacionales.

 

Los tres artistas, Carsten Fock (DE), Absalon Kirkeby (DK) y Karl Troels Sandegård (DK) han participado recientemente en la residencia del CCA. Para reflejar la diversidad de prácticas en los estudios, nos enorgullece presentar a un pintor, un fotógrafo y un escultor, todos ellos abordando el paisaje desde ángulos muy diversos.

 

Carsten Fock es un paisajista contemporáneo cuyas obras no sólo representan el paisaje alrededor de los estudios donde fueron realizados, sino que también tienen un fuerte toque personal y emocional, expresado a través de la naturaleza interior.

 

Al examinar sus pinturas, se puede intuir como los gestos de sus pinceladas son muy similares a los de su escritura, y es que la mezcla de texto e imagen crea una tensión contradictoria y simbiótica a la vez. Los trazos rápidos y expresionistas equilibran la pintura hasta tal punto que formalmente puede leerse como una composición musical.

 

Equivalente a la fuerza dialéctica entre gesto y texto en las pinturas de Fock, encontramos en las obras de Absalon Kirkeby una correspondencia similar entre la fotografía analógica y las "pinceladas" digitales que se funden en el proceso de sus propios paisajes visuales.

 

A través de  motivos tomados de escenas urbanas que se distorsionan en pequeños fragmentos de percepción, Kirkeby ofrece al espectador la oportunidad de sumergirse en su propio paisaje interior, donde las balizas personales de cada uno afloran al reconocerse en la abstracción.

 

Una tercera posición apunta hacia un enfoque orgánico. Los "bio-paisajes" de Karl Troels Sandegård se desarrollan orgánicamente con productos químicos que reaccionan sobre diferentes metales. Sus autorretratos no nos dicen nada sobre la apariencia o personalidad del artista, sino que son visualizaciones científicas de su ser.

 

Estas obras son representaciones húmedas de la transpiración y la respiración del artista centradas en el sudor construido clínicamente, que está hecho sintéticamente para que coincida con la composición exacta de la sal y los minerales presentes en el cuerpo del artista. En su serie de Autorretratos, Sandegård revela la presencia de algo invisible a la vista, traduciéndolo en algo físico.

Raúl Domínguez Carsten Fock, Absalon Kirkeby y Karl Troels Sandegaard, protagonistas...