¿Cuáles han sido los motivos que han llevado a tantos extranjeros a adquirir una vivienda en Mallorca?. La promotora Aedas Homes ha intentado dar una respuesta a esta pregunta mediante una encuesta entre sus clientes.
La fascinación que sienten alemanes, ingleses y suecos, principalmente, se fundamenta en varios puntos: el clima, la belleza de las playas y paisajes de la isla, las conexiones aéreas o la seguridad. Todo ello, unido a la calidad de las viviendas, convierten a Mallorca en un lugar único para comprar una residencia.
“Habíamos visitado Mallorca de norte a sur en muchas ocasiones y nos enamoramos de la gente, de su forma de ser y su estilo de vida”, cuentan los Brown, un matrimonio británico que se animó a comprar un piso en Palma, “Queríamos ser propietarios de una vivienda en Palma, una ciudad histórica, con excelentes zonas de restauración, muy cerca de playas hermosas y con el aeropuerto a pocos minutos”, añaden.
En la misma línea se expresan Schmidt y Beck, ambos alemanes y que recientemente se han convertido en propietarios en la isla, en concreto, en la zona de Andratx, donde han adquirido una vivienda en la urbanización New Folies, una promoción de exclusivos unifamiliares que se entregará este mismo año. “Mallorca es una isla con muy buena accesibilidad, un tiempo agradable, buenas infraestructuras y mucha seguridad”, afirma Schmidt. Para Beck, “el clima mediterráneo” y el hecho de contar con “un círculo de amigos” en la zona le hicieron elegir Mallorca antes que por cualquier otro punto de España.
Magni, un cliente sueco destaca que “la fantástica costa de Mallorca” fue otro elemento clave a la hora de decantarse por comprar una casa en Andratx. “La ubicación y las vista al mar, el tamaño y el diseño de la casa, así como todos los servicios que ofrece el complejo New Folies jugaron también un factor importante”, especifica.
El matrimonio Brown, en un principio, tenía pensado utilizar su casa en vacaciones y fines de semana largos, pero ya aseguran que, en un futuro próximo, su piso en Doria 6 se convertirá en su residencia habitual. Schmidt y su familia pasarán cerca de 3 meses al año en Andratx, mientras que Beck y Magni utilizarán su vivienda mallorquina sólo durante las vacaciones.
El peso de la demanda internacional en el mercado residencial balear es notable. Según el Colegio de Registradores de la Propiedad, hasta el 29,5% de las compraventas de vivienda realizadas en Baleares en 2018 tuvo como protagonistas a ciudadanos extranjeros -los notarios hablan incluso de 4 de cada 10 operaciones-. Estos números están muy por encima de la media nacional: la demanda internacional representó el pasado año el 12,8% (65.500 compraventas) del total.
