La reordenación de este espacio se basa en que La Llonja es uno de los principales ejemplos del gótico civil mediterráneo y merece la máxima protección a nivel de conservación del patrimonio historicoartístico, tanto el edificio como su entorno.
El regidor de Movilidad, Joan Ferrer, remarca en este sentido que “La Llotja es Bien de Interés Cultural declarado el 3 de junio de 1931”. “Desde entonces, es un edificio que ha disfrutado siempre de la máxima protección por parte de los poderes públicos y recientemente ha estado también restaurado y es un punto de referencia no solo en el patrimonio de Palma, sino también se ha convertido en escenario de ceremonias y exposiciones de arte de primero odre”.
Esta medida eliminará entre 15 y 17 plazas de aparcamiento aproximadamente y tiene por objetivo recuperar el espacio público para la ciudadanía. Desde hoy y hasta el próximo día 7 los controladores del área de Movilidad informarán a los residentes de la nueva medida a pie de calle. Además, han quedado instaladas las señales de prohibido aparcar en la calle de su Llonja y jardineras que prohíben el acceso de vehículos a la plaza.
Hay que recordar que durante el actual mandato el área de Movilidad ha dado diferentes pasos para recuperar para el peatón espacios emblemáticos de la ciudad, a la vez que se han protegido conjuntos monumentales como el Mirador de la Catedral, el portal de la iglesia de Sant Francesc con la implantación de la reforma de la ACIRE de Santa Eulàlia o la plaza del Banco del Óleo. De cara al futuro, se incorporará el eje Tous y Maroto-Velázquez.