El sector de la construcción ha presentado importantes síntomas de recuperación durante los dos últimos años en los que, después de tocar fondo había iniciado una recuperación a un ritmo constante.
Ahora bién, CAEB advierte que las perspectivas para este año no son nada halagueñas para el sector. En su último informe de coyuntura económica la patronal señala que "el menor tono que ha evidenciado la inversión en construcción durante el 2016 sugiere que esta mejora de la actividad difícilmente tendrá continuidad a lo largo del año en curso".
De hecho constata que "el presupuesto proyectado en los visados solicitados durante el ejercicio ha descendido (-16,2%) tanto en obras de reforma (-4,3%) como, especialmente, en obra nueva (-20,4%) y ampliación (-27,7%)".
En consecuencia, según CAEB "es de esperar que durante los próximos meses el pulso del sector recaiga, en mayor medida, sobre la iniciativa pública, dada la tendencia ascendente que ha mostrado la licitación oficial en los dos últimos años (47,9%, 2015; 26,8%; 2016)".
El sector de la construcción ha crecido en el último cuarto del año a un ritmo interanual del 3,3%, un porcentaje que se sitúa dos décimas por encima del anotado el trimestre anterior (3,1%).
Este comportamiento contrasta con la pauta de desaceleración que el sector ha venido mostrando durante los tres primeros trimestres del ejercicio y que explica que el avance en el conjunto del año (3,5%) haya resultado inferior al del curso anterior (3,7%).
Con todo, esta mejora de la actividad observada en los últimos compases del ejercicio descansa, en gran medida, en la reactivación de la inversión en construcción que se produjo un año atrás.
En este sentido, los réditos de la favorable coyuntura económica vivida durante el ejercicio 2015, en el cual el crecimiento de la economía se aceleró notablemente (2,9% vs 0,9%, 2014), especialmente en el cuarto trimestre (3,6%), fueron reinvertidos, en gran medida, en proyectos destinados a la construcción y remodelación de viviendas y establecimientos turísticos.
El presupuesto correspondiente a los visados de dirección de obra se incrementó con fuerza en el año 2015 (62,4% vs 0,3%, 2014) y, particularmente, en el cuarto trimestre (110,8%), tanto en proyectos de obra nueva (136,2%) como de reforma (95,9%). Este aumento del presupuesto destinado a proyectos visados (49,6%) fue especialmente intenso en lo referente a obras de naturaleza residencial (78%) así como de uso turístico (71,7%).
Esta dinámica ha dado paso a una mayor actividad en la tramitación de licencias municipales de obra durante el 2016. Concretamente, los datos disponibles –de enero a agosto– reflejan un incremento de las solicitudes de licencias de obra (30,4%) que excede con creces el registrado durante el mismo periodo del año anterior (8%) y que se extiende tanto a las obras de remodelación (10,3%) como de nueva planta (69,6%).
Todo ello, en conjunto, se ha acabado materializando especialmente en el cuarto trimestre, periodo en el que habitualmente se da inicio a las obras de mayor envergadura, una vez superados los meses de mayor actividad en el archipiélago.
Prueba de ello es que el volumen de trabajadores afiliados a la construcción ha experimentado en el cuarto trimestre el mayor crecimiento del año (8,2% vs 7,9%, 3r trim.), una circunstancia que se ha trasladado al ritmo al que se reduce el desempleo del sector (-18,9% vs -17,3%, 3r trim.).
Así mismo, la necesidad de aprovisionar esta mayor actividad constructiva ha elevado el volumen de gráneles sólidos descargados en los puertos de las islas, que se ha incrementado (52,2%) de manera más intensa que en el tercer trimestre (24%).
