viernes. 19.04.2024

El conseller Iago Negueruela ha visitado la empresa de calzados MIBO y la fábrica Denix, en Menorca, en el marco de la nueva convocatoria de ayudas a la modernización industrial, de la que fueran beneficiarias en 2017.


Durante el ejercicio anterior, el conjunto de las empresas menorquinas recibieron aproximadamente 1 millón de euros en ayudas a la internacionalización y la modernización.


MIBO es una pequeña empresa menorquina dedicada a la elaboración, venta y distribución de abarcas menorquinas. La fábrica está ubicada en Es Migjorn Gran, y cuenta con 32 trabajadores.



Combina la fabricación artesanal con las nuevas tecnologías, para crear modelos de abarcas tradicionales ya la vez innovadores. La marca cumple los estándares exigidos por el distintivo Producto de Menorca que garantiza calidad y autenticidad geográfica.



Esta empresa iniciará una apuesta decidida hacia la consolidación de sus exportaciones gracias a las ayudas convocadas por el Govern.



Por su parte, Denix es una empresa menorquina dedicada a la fabricación de objetos de decoración desde hace más de 50 años, y especializada en la producción de réplicas de armas antiguas. Actualmente Denix emplea a 27 personas y el 93,34% de su facturación procede de la exportación.



Con el objetivo de consolidar su implementación en los mercados exteriores, esta empresa ha solicitado una ayuda para financiar las necesarias acciones de marketing, de gestión y publicidad en redes sociales, de ampliación y mejoras en su página web así como otras acciones de promoción.



Gracias a la convocatoria de ayudas a la modernización industrial, convocadas por la Conselleria de Trabajo, Comercio e Industria, Denix aspira a consolidarse y crecer en los mercados que considera más importantes para su negocio.



El pasado 16 de junio se publicaron las nuevas convocatorias de ayudas a la modernización productiva y de la estructura digital, con un presupuesto de 3,47 millones de euros y que en los próximos días abrirá el proceso de recepción de solicitudes.

Las avarcas menorquinas quieren llegar más lejos