La conocida chef mallorquina regresa al panorama gastronómico mallorquín de la mano de LJs Ratxó, por el que ha sentido un auténtico flechazo, y al que quiere llevar a lo más alto con una cocina honesta, natural y elaborada con pasión y detalle, como si de una auténtica obra de arte se tratase
El hotel LJs Ratxó inicia 2022 con el objetivo de consolidarse como un destino en sí mismo, un reto en el que su propuesta gastronómica va a jugar un importante papel. Siendo consciente de ello, el que está llamado a convertirse en el mejor hotel ecológico de lujo sostenible del Mediterráneo ha decidido apostar por una chef con la que comparte la pasión por la cocina y un tremendo amor por la naturaleza: María Salinas
El destino ha querido que “Madame cuisine”, como le gusta que la llamen, llegue a LJs Ratxó para marcar el camino de su propuesta gastronómica, y haga de esta relación un flechazo de éxito. Una tarea que, como los buenos guisos, se cocerá a fuego lento, y como a María le gusta: con pasión, detalle y aprovechando todo lo que este privilegiado enclave de la Sierra de Tramuntana le pueda aportar.
Además de los productos locales y de cercanía, que la prestigiosa chef conoce muy bien, María quiere convertir el huerto ecológico de LJs Ratxó en un laboratorio para nutrir sus platos de sabores sinceros y colores que sólo la naturaleza puede crear, inspirándose para lograr los pantones perfectos en el mágico entorno que rodea a este espectacular eco luxury retreat.
Pero ese fascinante rincón creativo también será un punto de encuentro para reunirse con los comensales y clientes del hotel, debatir, y sentir la magia de la naturaleza, comprobando de primera mano cómo los productos extraídos directamente del campo, y llevados de inmediato a la mesa, multiplican su sabor, haciendo de la tierra la mejor nevera para preservar una alimentación honesta y auténtica. La nueva propuesta gastronómica de María Salinas estará disponible en LJs Ratxó a partir del próximo mes de febrero.
María Salinas iba para contable, pero siempre tuvo alma de artista. Mientras los números colmaban sus cuartillas; su mente diseñaba ropa para su familia, imaginaba formas y colores para sus tejidos, e ideaba técnicas para reformar muebles antiguos y recuperar su esencia. De ahí a diseñar platos como quien crea una obra sobre un lienzo en blanco hubo un paso, que dio ya de adulta, con 30 años, y con 3 hijos pequeños a su cargo.
Pero aunque logró dar rienda suelta a su vocación tardíamente, su disciplina y enormes ganas de aprender hicieron que evolucionase rápidamente, llegando ser una de las chefs femeninas más prometedoras del panorama gastronómico mallorquín, y logrando el sueño de tener su propio restaurante en Mancor de la Vall, un precioso pueblo ubicado igualmente en la Sierra de Tramuntana.
Una experiencia única que dejó en lo más alto para seguir inspirándose y que, tras un tiempo en Noruega, guarda en su baúl de autodidacta, para plasmar todo lo aprendido en los últimos 19 años en LJs Ratxó, dónde quiere ser a la par artista que cocinera, dedicando mimo y tiempo a los guisos, sacando lo mejor de los platos de cuchara y de la cocina tradicional, que son su referente, y viviendo su madurez gastronómica con pasión. Y es que a María Salinas la cocina se lo ha dado todo, y la de LJs Ratxó se ha convertido en su nuevo hogar. ¡Bienvenida!
El ratxó que canaliza el agua proveniente de la Sierra, desemboca en las profundidades del valle generando vida, y convirtiéndose en el hilo conductor de este proyecto único de lujo sostenible, ubicado en una espectacular finca del Siglo XIV, que ocupa 2,6 millones de metros cuadrados de terreno.
Como si de un pueblo de montaña se tratase, LJs Ratxó (Mallorca) emerge uniendo distintos edificios de arquitectura local, revestidos de la tradicional piedra vista mallorquina, en los que se ubican las 25 habitaciones de entre 25 y 80 metros cuadrados del hotel, todas ellas con terraza o jardín, un atributo imprescindible para poder gozar de tanta belleza; y las más exclusivas con piscina privada propia.
Un mobiliario rústico de Can Garanya, y diseños absolutamente mediterráneos como la tela de aguas, el cristal soplado, los envases de barro de Terracuita, las lámparas elaboradas con madera proveniente de la finca, el restaurante Roots regentado por la chef María Salinas, y un acogedor y ecológico spa, aportan un plus de autenticidad a un establecimiento que se presenta como referente de la Mallorca más auténtica. Con un plan de gestión sostenible global, de ámbito 360º, aspira a convertirse muy pronto en el hotel de lujo más ecológico del Mediterráneo.
