Blau Hotels se ha embarcado en un nuevo proyecto destinado a diversificar su oferta poniendo, más que nunca, en valor el turismo de calidad y la sostenibilidad como ejes de esta nueva aventura. La cadena mallorquina acaba de abrir el hotel Blau Monte Turri en la localidad de Árbatax, en Cerdeña y el próximo 1 de mayo hará lo mismo con el Blau Cala Moresca ubicado en un mismo espacio o ecoresort.
De hecho la hotelera ha puesto por bandera la sostenibilidad y la integración en el entorno en un establecimiento que ha recibido el premio como mejor ecoresort del mundo.
Esto días un grupo de perodistas de medios baleares entre los que se encuentra Economiademallorca están descubriendo las posibilidades que ofrece en cuanto a alojamiento, servicios, gastronomía y experiencia este resort situado en la costa oriental de Cerdeña.
La voluntad de la empresa mallorquina es la de atraer a un turismo de calidad que busque un equilibrio entre la naturaleza, servicio, tranquilidad y exclusividad. Para ello cuenta en un mismo resort con el Monte Turri, un hotel de tipo boutique de 17 habitaciones que se encuentra ubicado en el cielo de un pequeño valle que da al mar y que cuenta con una de las mejores 11 terrazas con vistas de Italia según el Corriere della Sera.
Junto al hotel, un poco más abajo se encuentra situado el Cala Moresca, un complejo de 260 habitaciones construido a imagen y semejanza de un pueblo sardo y edificado con materiales reutilizados de otras construcciones.
Blau quiere convertir este establecimiento en el buque insignia de una linea de negocio destinada a un público más exclusivo. Después de una primera temporada veraniega experimental condicionada por la pandemia, la hotelera esperaba despegar este verano gracias en buena parte al mercado italiano y también por el ruso que tiene mucha querencia por Cerdeña.
El conflicto en Ucrania ha obligado a cambiar las previsiones. Para empezar se confía mucho en la respuesta del mercado alemán y tambén se quiere contar con el inglés, si bién el público italiano seguramente seguirá siendo el mayoritario. En este sentido, se ha comentado que existen muchas posibilidades que la naviera Grimaldi ofrezca una conexión directa por mar entre Roma y el puerto anexo de Árbatax, lo que elvaría el flujo de turista nacional italiano hacia esta zona.
Además se persigue que esta oferta llegue a Baleares gracias sobre todo a la implantación de una linea directa entre Palma y Cagliari que ha establecido Ryanair y que vuela los lunes y viernes hacia la capital sarda. Se trata, en todo caso de una apuesta estratégica por ofrecer un producto turístico diferente con un alto valor añadido.
