jueves. 18.04.2024

El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, ha asegurado este jueves que la fusión con CaixaBank sigue su curso y que esperan tener todas las aprobaciones necesarias "como mucho en dos meses", en línea con lo previsto, y completar la integración tecnológica antes de que finalice este año.

 

 

En la última presentación individual de resultados ante los analistas, en la que también ha participado el director financiero de Bankia, Leopoldo Alvear, Sevilla ha repasado los nueve años de historia del banco, propiedad del Estado en algo más de un 60 %, y ha agradecido, visiblemente emocionado, el trabajo de la plantilla, especialmente este último trimestre.

 

"Tienen mucho mérito, porque estos procesos (de fusión) crean incertidumbre" y el equipo ha mostrado una gran serenidad y madurez y ha logrado hacer "un trimestre récord", ha añadido Sevilla, que también ha recordado las dificultades sufridas por la plantilla en el pasado y el magnífico resultado conseguido.



En cuanto a 2020, ha sido "complejo", pero ha ido "de menos a más" y Bankia ha conseguido un resultado "core" (del negocio puramente bancario) "muy fuerte y mejor de lo esperado", por lo que afrontan la fusión en una situación "mucho mejor" que la que tenían cuando se anunció la operación, el pasado septiembre.



En cuanto al futuro, los directivos no han hecho previsiones de resultados, ingresos o demanda crediticia, precisamente por la fusión, pero sí han explicado que esta última se verá condicionada por la evolución de la pandemia de coronavirus, el proceso de vacunación, y el uso de los fondos europeos "Next Generation", que pueden reactivar "el tono empresarial" y el crédito.



En cualquier caso, el crecimiento registrado en 2020 por el crédito corporativo no tiene visos de repetirse en 2021, debido al gran dinamismo mostrado el año pasado, en gran parte gracias a las medidas de apoyo y los avales del Gobierno.


Así, de los 10.000 millones de euros concedidos a empresas, unos 8.000 millones tienen aval, al tiempo que de la deuda previa que tenían estas empresas con el banco (unos 16.000 millones), Bankia ha puesto unos 4.200 millones en "vigilancia especial", el paso previo a considerarlos dudosos, por el sector de actividad al que pertenecen.


Se trata de una clasificación adelantada a los requerimientos del supervisor y "preventiva", ya que en estos momentos no hay impagos en esa cartera ni en la total, los citados 16.000 millones, ha añadido Alvear.



Por último, ambos han agradecido a los analistas "de parte de los casi 16.000 empleados de la entidad", su trabajo de los últimos nueve años y el respeto mostrado con los comentarios que han dedicado al banco.

Bankia espera que la fusión con CaixaBank se apruebe como mucho en dos meses