La economía española crecerá un 5,8% en 2022, después de hacerlo un 4,4 % en 2021, "impulsada por el gasto de los consumidores y de las empresas a medida que disminuyen las elevadas tasas de ahorro", destacó hoy el informe de perspectivas publicado por Credit Suisse.
La entidad suiza destaca que la producción española se sitúa aún muy por debajo de los niveles previos a la pandemia, "pero está recuperando rápidamente terreno y debería seguir así a lo largo del próximo año", apoyada por la exitosa campaña de vacunación y la reapertura de la economía tras el segundo trimestre de 2021.
El desembolso del Fondo de Recuperación de la Unión Europea será un factor que estimule el crecimiento, indica el banco, que presenta como un "riesgo clave" pero "a la baja" que los precios del gas y de la energía sigan en niveles altos hasta bien entrado el próximo año.
La factura energética ha provocado que la inflación en España se haya disparado más rápidamente que en el resto de la eurozona, lo que según Credit Suisse podría afectar a la renta disponible de los hogares y frenar el consumo en 2022.
La entidad bancaria prevé que el desempleo español regrese a las tasas anteriores a la pandemia el próximo año, después de que el mercado laboral haya mantenido "gran solidez gracias al mecanismo de los ERTE".
Credit Suisse presenta como un riesgo adicional para España la necesidad de un ajuste fiscal en 2023, teniendo en cuenta que el déficit del país se mantendrá probablemente por encima del 5% en 2022.
Con una relación entre la deuda y el PIB cercana al 120%, "España podría verse presionada a tomar medidas de consolidación de sus finanzas públicas una vez que vuelvan las exigencias del Pacto de Estabilidad y Crecimiento en 2023", advierte el informe.
Credit Suisse expresa su confianza en que en el mercado bursátil las acciones españolas "ofrezcan atractivos rendimientos en 2022", ya que sus bases siguen siendo atractivas y "se apoyan en las expectativas de repunte del ocio, los viajes y el turismo".
