Los bares y restaurantes de Mallorca deberán cerrar a partir de ahora a las 18 horas en todos los casos. La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha anunciado nuevas y duras restricciones en la isla ante la negativa evolución de contagios en las últimas fechas.
Esta restriccion implica otro serio revés para los restauradores que ya hasta ahora estaban obligados a solo servir en terrazas en caso que las tuvieran y cerrar ya a las 18 horas en fines de semana y vísperas de festivos.
A la restauración se le suma ahora el comercio que de forma general deberá adelantar su cierre de forma obligatoria a las 20 horas, exceptuando los casos de los establecimientos definidos como esenciales en el decreto del estado de alarma y las gasolineras. Entre estos establecimientos se ubicarían los dedicados a la alimentación, productos higiénicos, farmacias, ópticas, servicios de peluquería y estética o veterinarios.
Armengol también ha anunciado que se deberán reducir los aforos de los aparcamientos de las grandes superficies comerciales a solo el 50% de su aforo. Además los establecimientos de más de 700 metros cuadrados o los grandes centros comerciales no podrán abrir durante los fines de semana ni festivos y solo podrán hacerlo aquellos que se dediquen de forma excusiva a la venta de productos esenciales y alimentación.
La presidenta, además, ha recomendado que las visitas a centros comerciales se realicen de forma individual o como máximo de dos en dos personas y que se evite acudir en nucleos familiares enteros de hasta 6 personas.
Armengol ha defendido estas medidas apelando a la necesidad de evitar aglomeraciones y situaciones de relajación social. Ha asegurado que son medidas imprescindibles por que está en juego la salud y la vida de las personas".
