viernes. 29.03.2024

 

Una gestión pública con un gobierno corporativo que integrase a políticos, hoteleros y empresarios. Esta era la propuesta que recoge el informe de viabilidad del Palacio de Congresos de Palma de Mallorca que el ex gerente, Josep Sintes, entregó al ayuntamiento de Palma hace pocos días. Este modelo implicaría la contratación externa de un operador de congresos internacional de reconocido prestigio.

 

Así lo reconoció el propio Sintes a EconomíadeMallorca, defendiendo que, con una explotación “profesional y eficiente”, el Palacio de Congresos puede ser autónomo económicamente.

 

 

Sintes defiende esta opción porque “tendría un mayor impacto social y económico para Mallorca y para Baleares”. Además, “con una gestión pública, podríamos conseguir, por ejemplo, que si hubiera espacios en la instalación no en uso en un momento determinado, que estos se pudieran abrir a la ciudadanía y así emplearlos con un uso social”.

 

El ex gerente, que ayer fue sustituido en su cargo por Alfonso Meaurio, asegura que “una gestión privada sólo sería rentable para el empresario que se quede con el Palacio, porque miraría por encima de todo por sus intereses, como es lógico, y no tendría en cuenta el impacto general que puede tener el Palacio en sectores como la restauración, audiovisuales u hoteleros”.

 

Sintes ha recordado que el impacto económico del Palacio, una vez que esté en marcha, es de cinco millones de euros mensuales. Asimismo, con respecto a la apertura, ha explicado que “a finales de febrero se entregará la obra por parte de Acciona, aunque aun quedarán seis meses de pequeñas obras y remates en su interior”. Entre otros, queda pendiente de acabar el equipamiento técnico y el mobiliario.

 

Sintes cree que “el Palacio tiene que estar abierto a todo el mundo, porque es un edificio público”.

 

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