Miralles ha afirmado que este modelo de financiación “es una herramienta que puede ser la solución para buena parte de los problemas de Baleares, puesto que permitirá mejorar la sanidad, la educación y la atención a la dependencia, así como diversificar nuestra economía y estimular la innovación empresarial y la investigación”.
Para El Pi, el concierto económico no se trata de un privilegio que solo se quiera para las Baleares, todo el contrario, “las comunidades que tenguin estos sistema serán las responsables de la recaudación de los dobleros y, por lo tanto, estarán obligadas a gestionar sus recursos con mayor cordura y responsabilidad”, ha añadido Miralles.
El Concierto Económico implica que cada Comunidad será la encargada de recaudar sus impuestos y tendrán autonomía para establecer los tipos impositivos. La Administración Central será la encargada de establecer las clases de impuestos vigentes en todo el Estado. Así se establecería una cantidad similar al cupo vasco, que se definiría en función de la población y de la renta, con el que cada comunidad autónoma contribuiría a las competencias en manos del Estado y por la solidaridad interterritorial.
Por su parte, el Secretario General del Pi, Josep Melià, ha explicado que la situación financiera de las Islas Baleares “es insoportable con medias de déficit anuales situadas entre el 8% y el 14% del PIB”. Además, Melià ha recordado que durante toda la legislatura, El Pi ha pedido desde todas las instituciones donde ha tenido representación que se cumpla el principio de ordinalidad fiscal “que no es otra cosa que recibir según lo que se aporta”.