viernes. 26.04.2024

 

La Confederación de Asociaciones Empresariales de Balears (CAEB) ha dado a conocer el nuevo informe de ‘Evolución Económica’ correspondiente al primer trimestre de 2018 y confirma que la economía balear, con un crecimiento interanual estimado del 3,3%, conserva el dinamismo mostrado a lo largo del pasado ejercicio (3,3%).

 

De esta manera, tal como ha señalado la presidenta de CAEB, Carmen Planas, “Balears mantiene un ritmo de crecimiento superior al de las economías de su entorno”, como es el caso de la economía española (3%) y del conjunto de la zona del euro (2,4%), gracias, fundamentalmente, a la firme evolución que muestran los pilares de la economía balear: el consumo de los hogares, por el lado de la demanda, y los servicios, en especial del ámbito turístico, por el de la oferta.

 

En esta coyuntura favorable, persisten, sin embargo, riesgos que en los próximos meses podrían afectar a los costes de las empresas y a la renta disponible de las familias, especialmente asociados a la subida del precio del petróleo, el proceso de normalización de la política monetaria y la retirada de estímulos por parte del Banco Central Europeo.

 

De ahí que la actual fase del ciclo expansivo se erija especialmente propicia para revisar las bases del crecimiento regional en un intento de garantizar su sostenibilidad “ante la proximidad de un escenario marcado por condiciones de entorno menos acomodaticias”.

 

El informe destaca que, desde el lado de la demanda, el consumo de los hogares se erige en el componente que en mayor medida está contribuyendo a sostener el ritmo de crecimiento regional. Prueba de ello es que el consumo privado ha avanzado en el primer trimestre a un ritmo interanual del 3,3%, esto es, una décima por encima del promedio del ejercicio anterior (3,2%).

 

Ello se debe, en gran medida, a la continua mejora del empleo (4,8% vs 4,6%, 4º trim.) y su efecto sobre capacidad de gasto de los hogares, así como al tono más contenido de la inflación (0,9% vs 1,6%, 4º trim.), una dinámica que está favoreciendo la evolución de los principales indicadores de consumo, como es el caso de las ventas del comercio minorista, cuyo crecimiento en el primer trimestre (2,9% vs 1,8%, 4º trim.) se ha situado entre los más destacados del territorio nacional (2%).

 

El crecimiento de la inversión se ha ralentizado entre enero y marzo hasta el 3,4% (vs 3,7%, 4º trim.), debido, principalmente, a la debilidad de la inversión de carácter productivo, tal y como se desprende del descenso en la producción de bienes de equipo (-18,6% vs 0,9%, 4º trim.).

 

Por el contrario, la inversión en el ámbito de la construcción se ha mantenido ajena a este comportamiento animada por la reactivación del mercado inmobiliario y ha continuado creciendo a tasas de dos dígitos durante el primer trimestre (52,5% vs 28,3%, 4º trim.) tanto en el ámbito residencial (40,8%) como no residencial (72,9%).

 

En este contexto, cabe apuntar que el sector exterior ha reforzado su contribución positiva al crecimiento regional en el primer trimestre gracias tanto al aumento de la exportación de servicios turísticos –tal y como apunta el incremento de gasto efectuado por los turistas extranjeros que han visitado el archipiélago (21,1%)– como al superávit, por segundo trimestre consecutivo, de la balanza comercial de bienes (47 millones de euros, 1º trim.).

 

 

En relación con los componentes de oferta, el informe detalla que el sector servicios, cuyo avance interanual en el primer trimestre se ha situado en el 3,3%, ha crecido ligeramente por encima de los tres trimestres anteriores (3,2%) gracias al pulso de la actividad turística. En este sentido, la celebración de la Semana Santa en el mes de marzo ha comportado un aumento de la llegada de turistas extranjeros (23,3%) que ha superado al del resto de destinos turísticos del territorio nacional (9,6%, España).

 

En consecuencia, las ramas más estrechamente vinculadas a la provisión de servicios turísticos han registrado, en el conjunto del primer trimestre, un aumento del empleo (7,3%) superior a la media regional (4,8%). Así lo corroboran los registros de afiliación de trabajadores de la restauración (5,8%), agencias de viaje (9%) y, sobre todo, alojamiento (10,8%), ámbito en el que las pernoctaciones hoteleras (2,1 millones) se han situado por encima de los valores del año anterior (1,9 millones).

 

Desde la óptica de la oferta, el crecimiento más dinámico se observa en el sector de la construcción, cuyo ritmo de avance se ha acelerado hasta situarse en el 4,4%, cinco décimas más que el promedio de 2017 (3,9%). Este hecho responde, fundamentalmente, al empuje que viene mostrando la inversión en construcción desde finales de 2015 y se traduce en una creación de empleo (6,6%) que supera la media del tejido productivo regional (4,8%).

 

Por el contrario, la industria, con un crecimiento interanual del 2,4%, ha crecido ligeramente por debajo del trimestre anterior (2,5%) como consecuencia del descenso de la producción industrial (-3,8% vs 2,5%, 4º trim.), lo que, si bien ha repercutido sobre la cifra de negocios del sector (-2,6% vs 6,2%, 4º trim.), no ha impedido que el incremento de la afiliación de trabajadores se haya mantenido respecto del trimestre anterior (3% vs 3,1%, 4º trim.).

El consumo de los hogares sostiene el crecimiento económico de Baleares