A pesar que la financiación autonómica ha representado el corazón de la reunión mantenida entre el Govern balear y la Generalitat Valenciana, en la agenda se han tratado también otros temas de alcance y repercusión.
Para empezar se ha acordado instar al Ministerio de Industria, Energía y Turismo del Gobierno del Estado y a la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea a la denegación de las solicitudes de prospecciones petroleras en curso y la suspensión inmediata de cualquier tipo de actuaciones encaminadas a realizar prospecciones en aguas del Mediterráneo.
Ambas comunidades solicitarán, además, la declaración como Zona Especialmente Protegida de Importancia para el Mediterráneo (ZEPIM) del Convenio de Barcelona.
Se trata de una propuesta relativa al corredor migratorio de cetáceos del área marina localizada entre las costas de las Illes Balears, Cataluña y la Comunidad Valenciana.
El acuerdo del Consolat que hoy se ha firmado mantiene que que “las diferentes iniciativas para realizar prospecciones petroleras provocan una enorme y justificada inquietud en la sociedad de las Illes y valenciana, por la incidencia devastadora que podrían tener sobre el medio ambiente y su economía. Es por eso que manifestamos el apoyo por parte del Gobierno balear y la Generalitat Valenciana a las iniciativas de la sociedad civil y de las instituciones públicas para detener los procesos para autorizar las prospecciones”.
Por otro lado, Baleares y Comunitat Valenciana también reclaman al Gobierno central la aceleración del proceso para que el Corredor Mediterráneo pueda ser lo antes posible una herramienta fundamental para el crecimiento, la mejora de la competitividad y de la productividad del arco mediterráneo.
En este marco, se establece la necesidad de que las Illes Balears cuenten con una mejora clara de la conectividad entre islas y con la península a corto plazo para no seguir sufriendo una clara situación de desventaja tanto para las empresas como para las familias.
Por último, ambos gobiernos trabajarán para mejorar la competitividad de la industria turística en un marco de mayor sostenibilidad, calidad y el alargamiento de la temporada turística.
