El pequeño comercio de Baleares quiere proponer un gran pacto de autoregulación global de las rebajas en la Comunidad. Así lo ha explicado a Economiademallorca el presidente de Pimeco, Bernat Coll, que ya ha contactado con Afedeco para hacer un frente común en esta materia.
La propuesta pasaría por que todas las patronales del pequeño comercio y las grande superfícies con el apoyo del Govern firmasen un acuerdo por el que, por voluntad propia, se delimitasen unos períodos de rebajas y una serie de usos sobre como llevar a cabo estos descuentos y sobre que productos.
Cabe recordar que en 2012 el Gobierno central aprobó un decreto ley por el cual se liberalizaban muchos aspectos del comercio, entre ellos por ejemplo, los periodos de rebajas y descuentos que dejaban de estar regulados por ley y de hecho desaparecían tal y como se conocían hasta el momento.
El acuerdo que ahora propone el pequeño comercio no tendría una validez legal y por lo tanto tampoco sería de obligado cumplimiento por parte de los establecimientos. El mismo presidente de Pimeco, Bernat Coll, lo reconoce pero considera que sería una buena fórmula para preservar mejor los derechos de los consumidores y proteger también las iniciativas comerciales.
Coll quiere poner sobre la mesa esta cuestión al conseller, Iago Negueruela, aprovechando las negociaciones que se entablarán para redactar la nueva Ley de Comercio. Sin embargo su encaje legal dentro de esta ley se antoja extremadamente complicado puesto que la liberalización de las rebajas y del sector ha venido impuesto desde Europa.
Para Coll "la situación actual en estos momentos, en los que se pueden aplicar descuentos y ofertas en todo momento es muy difusa para el comprador que no tiene claros sus derechos respecto a los productos que adquiere".
Coll pone como ejemplo otros pactos similares en otras cuestiones que se han llevado a cabo en otras comunidades entre grandes superfícies y pequeño comercio por ejemplo para no abrir los domingos.
El presidente de Afedeco, Rafel Ballester, también sería partidario de este gran pacto y de hecho apoyará a Pimeco a la hora de presentar la propuesta al Govern por que "la gente en estos momentos está muy despistada y esto perjudica a las compras y a la buena imagen del comercio".
Ballester también ve complicado dar un cierto grado de legalidad al acuerdo si bién piensa que una regulación voluntaria por parte de todos los implicados sería una buena opción.
