Rafa Nadal ha hecho de nuevo historia en Paris conquistando su doceavo torneo de Roland Garros, una proeza dificilmente imaginable hace años y que se antoja imposible de superar. Ahora bién la gloria deportiva también se conjuga, como en cualquier disciplina deportiva profesional de nivel con unas jugosas ganancias económicas.
Y es que el campeon malloquín, con su victoria ha conseguido llevarse un botín de 2,3 millones de euros; la misma cantidad de la campeona femenina Ashleigh Barty. Esta candidad implica un incremento de algo más del 4,5% respecto a hace un año.
Estos son los premios más llamativos de un torneo que ha repartido más de 42,6 millones de euros en premios, ni más ni menos que un 8% más. En esta edición, la mayor parte del dinero se ha destinado a compensar a los tenistas en las primeras rondas del torneo, en primer lugar por su número y en segundo para acabar con las diferencias desaforadas respecto al ganador del torneo.
Los dos finalistas del torneo se llevan casi 1,2 millones mientras que los semifinalistas unos 590.000 euros. Los tenistas que han alcanzado los cuartos de final obtendrán un cheque de 415.000 euros y de 243.000 quienes cayeron eliminados en octavos. En tercera ronda, el premio ha sido de 143.000 euros, de 87.000 euros en segunda, y de 46.000 en primera.
En el caso de los jugadores que han disputado las rondas de clasificación han recibido 24.000 euros como premio si han sido eliminados en el tercer partido, 12.250 si cayeron en la segunda fase de la clasificación y 7.000 si lo hicieron en el primer enfrentamiento.
A pesar del aumento de dinero para este año Roland Garros continua siendo el torneo de Grand Slam menos beneficioso para los jugadores ya que es el que tiene los peores premios. Así por ejemplon el Abierto de Australia paga 3.620.000 euros a su campeón. Le sigue el Abierto de Estados Unidos con 3.270.000 euros y Wimbledon con 2.730.000 euros.
