viernes. 29.03.2024

La política parece el arte de hacer posible lo imposible y esto se ha producido una vez más. El desencuentro que escenificaron PSOE y Unidas Podemos durante 6 meses y que abocó a unas elecciones generales se ha disuelto en apenas 24 horas.

 

En un gesto comunicativo de gran premura y sin precedentes Pedro Sánchez y Pablo Iglesias comparecieron ayer ante los medios para escenificar un acuerdo para gestar un gobierno de coalición en el que el socialista será presidente y el de Podemos será vicepresidente. Lejos ya quedan los vetos y no se sabe aún con certeza como se configurará el futuro ejecutivo. De hecho ambas partes han reclamado tiempo e insistido en que aún están por negociarse muchoes detalles. Lo que si se ha filtrado ya es que una de las vicepresidencias será para Iglesias y la otra podría recaer en Nadia Calviño.

 

Los líderes del PSOE y Podemos firmaron un documento en forma de decálogo que no deja de ser un principio de acuerdo pero en el que se perfila una filosofia pero no medidas concretas. En este acuerdo se habla de «combatir la precariedad del mercado laboral y garantizar trabajo libre, estable y de calidad». También habla de la lucha contra contra el cambio climático; a la protección de los servicios públicos, el blindaje de las pensiones o el combate contra la corrupción; al derecho a la eutanasia y a la muerte digna".

 

En una breve declaración tras la firma del acuerdo, Iglesias ha asumido el compromiso de actuar con lealtad y de dejar atrás diferencias pasadas a la vez que ha apelado a la decepción que generó la falta de acuerdo político y de gobierno.

 

Sánchez por su parte ha insistido en comentar que el nuevo gobierno será progresista en todos los sentidos y que permitirá superar la etapa de bloqueo actual. Sánchez ha dejado muy claro también que el gobierno tomará medidas destinadas a mejorar la vida de los españoles y que se abrirá al diálogo con todos menos con aquellos que quieren generar enfrentamiento entre los ciudadanos, en una clara alusión al discurso de VOX.

 

Ambas parte han indicado que se trata de un acuerdo para cuatro años y para dar governabilidad y estabilidad al país.

 

Lo cierto es que a ambas partes aún les queda un largo camino por recorrer para conformar Gobierno. Primero hay que asegurar una investidura y para ello se tendrán que recabar muchos más apoyos bién a través de un voto favorable o bién a través de una abstención. En este sentido tendrán mucho que decir los partidos regionalistas que han obtenido representación y también los nacionalistas como el PNV o ERC.

 

 

Sánchez e Iglesias cierran un acuerdo de gobernabilidad en tiempo récord