viernes. 29.03.2024

 

La riqueza financiera neta de las familias españolas, que se mide calculando la diferencia entre los ahorros y las deudas, se situó en 1,218 billones de euros al finalizar el pasado mes de septiembre, lo que implica un pequeño incremento del 0,9% en comparación con el mismo periodo de 2014.

 

Según los datos que hoy ha publicado el Banco de España, si nos fijamos en el dato del trimestre anterior, la riqueza financiera de las familias residentes en España cayó el 2%, ya que al cierre de junio era de 1,243 billones.

 

Se da la circunstancia de que este indicador, que se ha mantenido por encima del billón de euros desde 2012, también se redujo en junio respecto a marzo, cuando la cifra era de 1,266 billones, lo que significa que las familias han visto caer su riqueza financiera neta a lo largo de los nueve primeros meses de 2015, a falta del dato del cierre de ese año.

 

Los activos financieros de los hogares españoles -dinero en efectivo, acciones, depósitos y otros valores- bajaron el 0,75% a cierre de septiembre, hasta poco más de 2 billones de euros.

 

Lo mismo ocurría con los pasivos o deudas que mantenían los hogares a cierre de septiembre, que se redujeron el 3,3%, y se situaron en 786.126 millones de euros, siempre en comparación interanual.

 

La diferencia entre activos y pasivos constituye, como ya hemos dicho, la riqueza financiera de las familias, que un año antes, en septiembre de 2014, se situaba en 1,206 billones de euros.

 

En depósitos y cuentas bancarias las familias españolas tenían 847.568 millones de euros al finalizar septiembre, un 0,63% menos que un año antes y un 1,84% menos que en junio, en tanto que en acciones bursátiles y participaciones en fondos de inversión la suma alcanzaba 758.965 millones de euros, inferior a los 761.965 millones de un año antes y a los 780.502 de junio.

 

Además, las familias tenían otros 326.600 millones de euros invertidos en seguros y fondos de pensiones, cantidad que también había caído respecto a los 327.382 millones correspondientes al trimestre anterior, pero que había subido en comparación con los 324.652 millones de un año atrás.

 

En cuanto a los pasivos, que son básicamente las deudas que acumulan los hogares con las entidades financieras, en los nueve primeros meses se redujeron a 786.126 millones de euros, frente a los 812.941 millones que debían un año antes.

 

En comparación con el cierre de junio, las deudas también bajaron, ya que entonces eran de 798.899 millones.

 

Del total de la deuda, la mayor parte eran préstamos a largo plazo, que sumaban 707.208 millones de euros y se reducían respecto a los 735.940 millones de un año antes.

 

Por su parte, los préstamos a corto plazo sumaban 26.971 millones de euros, por lo que también caían respecto a los 27.114 millones de un año antes.

La riqueza financiera de las familias sube el 0,9%